Semidioses en Hogwarts

Botella catastrofica.

P.O.V Hermione.

Y como era de suponer todo fue un desastre.

Fred pidió a los chicos decir sus nombres, apellidos y edad.

Cuando Fred giró la botella por primera vez, esta rodó hasta casi hacerme marear, pero se detuvo en la chica morena, Piper.

—¿Piper verdad?— pregunto Fred sonriendo amablemente mientras la chica asentía—solo por ser nuevos en los días cotidianos de los Weasley, comenzaremos con algo sencillo. ¿te han hecho alguna broma? y si lo hicieron cual fue la peor.

Piper lo pensó durante un tiempo hasta que por fin contesto con un poco de timidez.

—me llamo Piper Mclean y tengo 16 años y volviendo al tema, A mi directamente no. Pero a mis her....—se detuvo abruptamente y con la misma rapidez que se detuvo volvió a hablar—pero a mis compañeras de un campamento el mes pasado unos chicos sabían que la mayoría de la cabaña eran muy superficiales así que utilizaron unos pendientes dorados junto una carta que decía "para la chica más hermosa de la cabaña" y las siguientes 4 horas fue un caos de tacones y maquillaje por todo lado— todos rieron y el chico de los ojos verde mar le susurró a la rubia "extraño a los Stoll" pero fue más que obvió que todo escuchamos.

—Piper, déjame decirte que mi hermano George y yo te adoramos por darnos esta grandiosa idea para hacer en Hogwarts a las chicas de Slytherin.

Después de decir esto Fred le pidió a Piper que rodará la botella y cuando lo hizo esta señalo a el Moreno pequeño e hiperactivo, Leo.

—A ver ¿Leo?— el chico asintió sonriendo— dinos las situaciones más fuertes de risa, confusión, molestia y dolor.

—Damas y caballeros les vengo a presentar mis emociones pero primero, me llamo Leo Valdez y tengo 15 y apunto de cumplir 16 —Leo hizo una mueca graciosa para insinuar que estaba pensando— de risa, creo que fue en un lago una vez cuando tuve que impresionar unas cuantas damiselas con mis músculos para que el del ego alto, ósea un chico que solo tenía ojos para el me prestara atención— Todos rieron pero más los amigos de Leo— termine con dolor de cabeza por tantos gritos y lleno de tatuajes diciendo lo hermoso que soy, ya saben, le encanto a las nenas.

—Confusión, creo que el odio que me tuvo una chica cuando visite una isla y ella estaba ahí, me miraba mal o simplemente me ignoraba, pero cuando me dispuse a irme, me beso— Leo sonrió tristemente y después miro un poco serio a Percy.

—Molestia, cuando mi amigo presente le prometió a una chica ayudarla y ella sigue perdida y sin ayuda.

Percy se puso tenso y nos dijo a todo que ya volvía pero Annabeth, la rubia, lo siguió.

—y dolor, mi... Mi madre—Leo hablo entrecortadamente—lo siento chicos no se sí quiero compartir eso con ustedes todavía y además no quiero ponerlos tristes—eso último lo dijo con una sonrisa más que fingida y sin decir más se fue.

Unos minutos después Annabeth y Percy volvieron y tomaron asiento.

Fred giro la botella la cual apuntó a Annabeth .

—A ver, creo que primero quiero saber tu nombre— dijo Fred

—Me llamo Annabeth Chase y tengo 16 años.—la chica tenía una forma de hablar haciendo que nadie la cuestionara.

—Bueno, Annabeth , ¿cuanto es 2+2?— todos los amigos de Annabeth miraron nerviosos y molestos de Fred a ella y en ese instante noté sus ojos grises de un color oscuro, una tormenta.

Fred la miro esperando reacción, desde el lado derecho de ella, Percy le hacia señas de no decir nada.

—Es una broma ¿ verdad?—Fred no dijo nada haciendo enfurecer a la chica.