Summer Camp |Kellic|

Capítulo 16: Sentimientos encontrados

Un nuevo día llegó y con ello una nueva actividad.

Kellin había pasado una noche no muy buena, ya que los recuerdos de Vic besándole aparecían en su cabeza cuando intentaba conciliar el sueño. El castaño llegó horas más tarde a la cabaña, cosa que empeoró la situación porque sabía que había estado con Danielle.

Él no era celoso en absoluto, desde pequeño su madre le había enseñado a respetar y compartir. Sin embargo, lo que no soportaba era que le besara y luego se fuera con otra persona.
¿Eso no se considera infidelidad?

Tras angustiosas horas de pensar y darle vueltas a la cabeza, cayó rendido a los brazos de morfeo.

Despertó más cansado de lo habitual, pero tenía que levantarse para desayunar. Siguió evitando a Vic y se dirigió al comedor después de prepararse. Allí, agarró una bandeja y con movimientos torpes se sirvió la comida para llegar a la mesa de sus amigos. Se sentó a un lado de Gabe y comenzó a comer sin entrometerse en la conversación que estaban teniendo.

— Kellin, ¿estás bien? — susurró Gabe mientras Justin y Tony seguían conversando animadamente sobre razas de perros.

— S-sí, no te preocupes — contestó soltando la tostada que tenía en las manos — No he dormido muy bien esta noche, eso es todo.

— ¿Y eso? — intervino alzando la voz Justin. Al parecer había escuchado las palabras del pelinegro.

— ¿Sabes que es de mala educación meterse en conversaciones ajenas? — cuestionó burlón el castaño.

— Kells es mi amigo y como los buenos amigos hacen, me meto donde quiera — alzó la barbilla con aire de superioridad.

— Espero que eso no vaya con segundas — bromeó Tony haciendo reír a los demás.

— Qué gracioso se ha despertado Tony hoy. A ver si se te pasa pronto — entrecerró sus ojos desafiante.

— Volviendo al tema. ¿Ha ocurrido algo o simplemente es insomnio?

— Bu-bueno, ayer pasó algo en el bosque — murmuró con las mejillas calientes al recordarlo — Pero no sé si es buena idea contarlo.

— ¡Claro que lo es! ¿Qué mejor que nosotros para aconsejarte? — dijo el rubio pasándose al lado contrario de la mesa para poder sentarse junto a Kellin.

— Que tú, cualquiera — dijo de nuevo Tony viendo al nombrado rodar los ojos.

— No les hagas caso a estos que hoy están más tontos de lo habitual — levantó la cabeza para señalarles como advertencia — Puedes confiar en nosotros — le sonrió reconfortante Gabe.

Tragó saliva notoriamente y después de soltar todo el aire que estaba aguantando en sus pulmones, procedió a relatarles lo que pasó el día anterior. Desde que se perdieron hasta el extraño beso.

— ¡Te besó! — dijo bajito pero alterado Justin mientras intentaba retener un pequeño grito de sorpresa.

— Al final yo tenía razón y sí le gustas — mencionó sonriente Tony.

— Pe-pero dijo que sólo fue para pro-probar. No le gustó — respondió nervioso Kellin bajando la cabeza y comenzando a jugar con los puños de su suéter.

— Nah, eso son excusas. Lo hizo porque quería hacerlo — Gabe concluyó.

— ¿Tú crees?

— Por supuesto que sí. Eres un chico encantador, Kells. Cualquiera caería rendido a tus pies.

— ¿Esas son indirectas, Gabe? — Justin levantó ambas cejas rápidamente sugerente.

— Ni caso — hizo un leve movimiento de manos para restarle importancia — Ahora cambiemos de tema para que dejes de comerte más la cabeza con eso, ¿sí? — le dio un ligero apretón en el hombro y comenzaron a hablar de otras cosas.