La Academia Widenbourg.

Capítulo 26.

Instintivamente llevo una mano a mis labios y aparto mi vista de él avergonzada.

Demonios...¡Tengo 18 años! ¡¿Porqué me avergüenzan éste tipo de cosas?!

Siento mi rostro ponerse más y más rojo. a éste punto, no quiero que me vea. Sin duda, es la primera vez que me siento tan avergonzada.

—Aunque...me hubiese gustado que nuestro primer beso hubiera sido en otras condiciones...y no conmigo estando borracho, tuvo que haber sido desagradable.

—¡C-Cállate! ¡sólo haces la situación más y más incómoda! -Digo, y me volteo. la risa de Jean se incrementa.

—Llevo años callando lo que de verdad siento. ahora que sé que es recíproco, no me voy a callar. ahora mismo, sólo quiero decirlo adecuadamente. mírame.

Me toma unos segundos, pero lo miro. comienza a hablar, ésta vez con rostro serio. se acerca un poco más, y tímidamente toma mis manos entre las suyas, acariciándolas con su pulgar con gesto amoroso.

—Jean estás temblando...tienes las manos heladas...—las envuelvo entre las mías, para brindarle algo de calor. me corresponde, tímidamente.—

—S-Si, lo sé...e-es solo que...toda ésta situación me tomó desprevenido, no me lo esperaba, y soy algo cobarde. puede que no te haya confesado lo que siento hasta ahora por eso...

Niego con la cabeza y guardo silencio indignada. Jean no es ni nunca será cobarde...

Yo soy la tonta aquí.

—Taylor, estoy siendo muy serio contigo. en años, no he podido deshacerme de ésto que siento por ti. amo tu valentía, amo tu voz, amo tu sinceridad...cielos, creo que amo hasta tu forma de caminar.—ríe.—No soy un noble príncipe como Connor, no soy perfecto y tampoco podré darte todo lo que mereces, pero...mi corazón solo te pertenece y pertenecerá a ti, y haré lo necesario para que seas feliz. te amo...

Ah...

Siento una estaca en el corazón oyendo aquellas sinceras palabras. ¿Ha tenido que esconder éstos sentimientos por tanto tiempo...?

—...Hombre. se siente extraño decirlo en voz alta—ríe—Pero es como en verdad me siento...

Tomo en una mano su mejilla y parte de su nuca, obligándolo a mirarme. acerco nuestros rostros.

—Deja de compararte con Connor, deja de hacerte daño...—murmuro—no necesitas nada de esas cosas. eres único y te amo por ser tú, por ser Jean...no quiero que seas mi mayordomo o mi príncipe, quiero que seas tú y estés conmigo...

Digo ello, mientras le miro. en medio de un gran silencio...

Ésta velocidad a la que late mi corazón dentro de mi pecho...éstas cosquillas en mi estómago...éstas ganas de proteger y atesorar al frágil chico que tengo en frente...

Todas éstas cosas que no sentí con Connor...

Ésto debe ser lo que amar de verdad significa.

La distancia entre nosotros cada vez es más corta, ambos tímidamente observamos nuestros labios, cada vez más cerca el uno del otro.

Entonces...

—¡Atchú! -Un pequeño estornudo nos alerta e inmediatamente nos separamos. cuando vemos de donde provino, está Chloe cubriendo su boca con ambas manos, y su rostro completamente rojo.

—¡¡¡¡L-Lo siento!!!! ¡No era mi intención espiarlos!

Jean y yo nos ponemos de pie al mismo tiempo, bastante incómodos.

—¿Cuanto llevas ahí? -Jean pregunta, mientras se ajusta el cuello de la corbata.

—N-No mucho...solo venía a decirles que la directora dará un anuncio muy importante. no puede hacerlo por los altavoces ya que se estropearon...en cuanto puedan, por favor, vengan a la sala principal.

Dice, mientras se va.

Me toma discretamente de la mano, de igual manera entrelazo mis dedos con los suyos. siento mi rostro arder...ninguno de los dos habla, pero por momentos nuestras miradas coincidían y nos limitábamos a sonreír.

Caminar de éste modo con él...me recuerda a cuando éramos niños. los nervios son los mismos, la atmósfera entre los dos es igual. su mano conserva la misma calidez pero no tamaño. aunque, al igual que en aquellos días...es capaz de envolver la mía fácilmente.