Solo Una Vez y Para Siempre

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Takano sube los escalones de tres en tres para llegar lo más rápido que puede donde se encuentra su castaño adorado, se detiene de golpe en la puerta y trata de regularizar los latidos de su corazón, llama dos veces a la puerta y escucha un suave "adelante", entra y aun no puede creer lo que ve, el amor de su vida esta semi recostado en su cama y es igual a como lo recordaba; ojos verdes brillantes, piel blanca , cabello castaño y su complexión para ser un chico es delicada, no puede evitar el impulso que siente y de dos zancadas llega donde este se encuentra y lo envuelve entre sus brazos. - No sabes cuanto te he esperado. El contrario solo atina colocar una de sus manos en el pecho del azabache mientras su rostro estalla con el color de la sangre, no entiende porque el abrazo de este hombre no le molesta todo lo contrario es como si en esos brazos hubiese encontrado el hogar al cual pertenece y siente como si su corazón comenzara a latir al mismo ritmo que su acompañante, sin ser consciente deja escapar un suspiro, de pronto se da cuenta de lo que acaba de hacer, se da unas veinte bofetadas mentales y sale de su embobamiento, se deshace del abrazo y carraspea la garganta para recobrar la calma.

- ¿En donde estoy?, ¿usted fue quien me rescato?, ¡necesito comunicarme con mi familia!.

- Jajajaja.... veo que no haz cambiado del todo, sigues siendo apresurado, estas en mi casa, yo te rescate, y no tenemos teléfono, como podrás ver ni siquiera hay luz eléctrica y son las 3:30 de la mañana, si gustas cuando haya amanecido puedo enviar un mensaje a tu familia para que sepan que estas bien. 

- Creo que no se puede hacer nada, gracias por ayudarme, ¿puedo saber su nombre?

- Oh!. Es cierto cada vez que nos hemos visto nunca te he dicho mi nombre, soy Takano Masamune.

- Mucho gusto, yo soy Onodera Ritsu.     

 - Lo sé.

- Pero yo no recuerdo haberlo visto alguna vez, ¿no será que me esta confundiendo?

- Jamas en mi vida podría confundirte, supongo que no es como esperaba, pero el día de la ceremonia te mostrare muchas cosas y seguramente recordaras de inmediato, ¿por qué te quedaras hasta entonces verdad?, es mas nunca te volverás a ir. Takano intenta darle otro abrazo a Ritsu, pero este lo rechaza.

- Perdón pero no entiendo mucho a que se refiere, yo no recuerdo nada de usted y no veo ¿por qué? quiere retenerme en este lugar, yo debo volver con mi familia, Ritsu intenta levantarse de la cama pero cae inmediatamente. - ¡Auuch!..

- Quédate tranquilo, te lastimaste el tobillo durante la persecución, será mejor que descanses más tarde continuaremos esta plática, si necesitas algo estaré en la habitación de al lado.

El azabache termina de arropar al castaño, apaga la vela en la habitación y sale de esta, al llegar a su pieza, suelta un gran suspiro cargado de varios sentimientos, - Realmente esto no es lo que esperaba.

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Tock.. Tock... Tock... - Soy yo, Masamune...

- Entra

- Buenos días Masamune, perdóname por molestarte..

- Buenos días, no hay problema, como puedes ver desperté hace rato.

- ¿Qué demonios tienes no dormiste en toda la noche?, Kirishima Zen poseía una cara de cansancio, frustración pero se hacia notar más la tristeza en este.

- No responderé eso porque ya lo sabes, mejor cuéntame ¿como te fue?, ¿ ya hablaste con él?

- No me recuerda, él no recuerda que en sus sueños vino a este lugar y que nos encontramos en algunas ocaciones, al principio lo sentí tan cercano a mi y un momento después me rechazo, quizás sea porque este confundido, la verdad no sé, pero cuando le muestre los alrededores y platiquemos calmadamente seguro recuerde, sus miedos y dudas desaparecerán y entonces le explicare sobre nuestra conexión. ¿y tu que tal? por lo visto no te fue mejor que a mi.

A través del Tiempo y la DistanciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora