Oportunidades

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Oscuridad, todo a mi alrededor es oscuridad; no se hacia donde debo ir, ni a quien debo recurrir para salir de esta densa oscuridad. – ¡HAY ALGUIEN QUE PUEDA AYUDARME!_ nadie, no hay nadie; todo es silencio, silencio y oscuridad, por más que corra, por más que grite, no puedo salir de esta oscuridad y tampoco puedo escucharte. A lo lejos logro ver unas pequeñas luces, corro hacia donde estas están, conforme me voy acercando; puedo ver que hay más de ellas, saliendo de una puerta a medio abrir o quizás a medio cerrar, me acerco a la puerta, la empujo y entro, hay miles de luces revoloteando en un paisaje nocturno precioso, cientos de diversos árboles rodean una laguna y sobre esta hay miles de pequeñas luces revoloteando, el cantar de los búhos y los grillos hacen descansar mi corazón, me acerco a la orilla de la laguna y puedo ver un enorme lobo color negro que se encuentra enrollado durmiendo tranquilamente, mi corazón comienza a golpear dentro de mi pecho, mis lagrimas comienzan a derramarse sin control y mi mente me repite una y otra vez, eres tu, al fin te encontré. El lobo se percata de mi presencia, despierta sobresaltado y me observa con un rostro lleno de confusión, rápidamente se da la vuelta, y corre hasta perderse en la oscuridad de la noche, - ¡No¡ ¡no te vayas, regresa! ¡regresa por favor!...

- ¡No te vayas!... siento como mi madre me envuelve entre sus brazos, y acaricia mi espalda

- Tranquilo Ritsu, fue una pesadilla, ya,,, ya,,,.

- No mamá, no fue una pesadilla, era él, era él mamá...

- ¿Quién? ¿Quién es él, cielo?

- Él es la persona que me hace tanta falta, mi madre deshace el abrazo y toma mi rostro entre sus manos, tratando de apartar mis lágrimas

- Hijo, ya llevas tres días sin poder dormir lo suficiente, dime como puedo ayudarte, me duele tanto verte sufrir de esta manera.

- Es que,, Es que ni yo mismo se quien es mamá, lo único que se es que yo debo estar con él, y la distancia entre nosotros es lo que me esta matando. Mi padre entra a mi habitación con una jarra de agua, en estos últimos días ambos han estado quedándose conmigo ya que las pesadillas no me dejan tranquilo, nunca imagine que en algún momento iba a tener a mis dos padres juntos apoyándome, tenerlos a ambos conmigo me llena de tranquilidad, realmente la familia que tengo es maravillosa, pero ni siquiera ellos pueden calmar el dolor en mi alma.

- Amor, yo me quedo con Ritsu, tu padre quiere hablar contigo te esta esperando en su estudio.

- ¿Estarás bien?

- Claro que si mamá, estaré bien con papá, ve a ver que quiere mi abuelo.

- Esta bien, traten ambos de descansar. Mi madre nos da un beso en la mejilla a ambos, para después dirigirse donde mi abuelo. Mi padre y yo nos recostamos con los ojos cargados de sueño, siento como comienza a acariciar mi cabeza y no puedo evitar reír.

- ¿Qué es lo gracioso?

- Debo verme tan patético, como para que a mi edad tengas que tratarme como un niño.

- Bueno, déjame consentirte aunque sea ahora que ya eres adulto, después de todo me perdí de esto cuando eras un niño, supongo que ahora es como una segunda oportunidad

- Perdóname papa,

- Mmm... ¿a que viene eso?

- Solamente que, no pude convertirme en el hijo que tu querías, mira lo lamentable que soy

- Ritsu, deja de abrir viejas heridas; antes yo me encontraba equivocado, trataba de llenar las expectativas de mi padre y consecuentemente intente, que tu llenaras las mías o mejor dicho las de él, ya ves murió y nunca fui el hijo que quiso, mi padre solamente amargo mi vida; ahora me doy cuenta que aunque yo fuera su hijo, era una persona diferente; con derecho a tomar mis propias decisiones y buscar mi felicidad, pero aun así, me hubiese gustado tener su aprobación, pero esa historia tu ya la sabes. ahora basado en mi experiencia puedo darte un consejo de padre; busca tu propia felicidad, busca, encuentra, cae, levántate, ríe, llora, alégrate, enojate, piérdete, encuentrate, vive a plenitud cada día de tu vida y sobre todo ama, ama con intensidad; para que no tengas arrepentimientos, después de todo solo en esta vida seras tu, no se sabe si vivirás otra. Ten por seguro que no eres el hijo que quise tener, eres más que eso, tu eres el hijo, que un mal padre como yo no merece, y siempre seras mi orgullo. Papá me abraza y besa mi cabeza.

A través del Tiempo y la DistanciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora