SOMOS - (KyuSung) EN EDICIÓN

9° Volveremos

Los próximos días no recibo ni una mirada de Kyuhyun, Heechul enfermó y según Siwon ni siquiera podía hablar. Le había dado paperas.
Fui a verlo y le platiqué todo. Recibiendo un extenso insulto hacia Kyuhyun escrito en una hoja de papel de un muy hinchado Kim Heechul.

Sungmin me dio muchos animos cuando le dije todo lo que había soltado en la cara de Kyuhyun, me felicitó por valiente y me regañó por haber aceptado ir con él.

Pero estaba muy seguro que algo venía. Sentía una sensación extraña que me indicaba que estaba por suceder algo.

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Como en algún momento lo creí, Kyuhyun  había comprado a Heechul con nada más ni nada menos que el teléfono personal de Hangeng, Heechul también había estado un poco mal con su partida, pero lo superó por Siwon. Aunque no quitaba el cariño que sentía todavía por el antiguo capitán de Baloncesto.

— No sabía que aún mi hijo se llevaba contigo, Heechul.— Mamá está de la mano con Heechul, ha dejado a mi padre a cargo de la cafetería en su intento desesperado por conocer al rebelde de los tatuajes.

— Sí, somos como pan y mantequilla.

— Y tú que ya has visto a este chico. ¿Es tan caliente cómo me lo describe JongHoon?

— ¡Mamá! — La reprendo entre dientes y con el rostro enrojecido hasta las orejas.

— ¡Señora, pero qué pregunta!— Heechul finge una ofensa tremenda que mamá la toma con gracia.—  La verdad no es muy mi estilo, pero un buen revolcón no le andaría negando.

— Aaaaah quiero conocerlo. — Grita como niñita emocionada.

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— Es un gusto conocerla señora Kim.

Jiyong hace una reverencia y le sonríe de forma encantadora a la mujer que sonríe como quinceañera enamorada.

— El gusto es mío… Y eso en tu cuello, ¿qué es?

— Un arcángel. — Le responde mientras se lleva una mano al cuello.

— Se te ve precioso.

— Y, qué es lo que va a querer señ..

— No me llames señora, dime Bo Kyung.
Esto era el colmo, mientras Heechul observa todo con una sonrisa divertida, yo me estoy muriendo de vergüenza, ahora hasta un completo extraño, para ella, le puede decir por su nombre. ¿Donde quedó el respeto y los modales que mis abuelos le exigieron a mi padre para que se casaran?

— Será Bo Kyung, entonces.

No tengo idea del tiempo que mamá permanece con el brazo descubierto, tengo en cuenta las miradas, guiños y sonrisas fugaces que intercambio con mi “Cabellos de plata”. Por lo mismo, lo poco que he podido ver el tatuaje, sé que está quedando precioso.

¿Es normal que las mamás se tatúen un panesillo?

— ¡Listo! Un cupcake. — Ji levanta las manos victorioso, se quita los guantes y deja aun lado sus materiales. Su fan número uno se levanta hasta el espejo y se abalanza a besarle la mejilla. Heechul salta emocionado y yo me cubro los ojos con una mano.

— ¡Te quedó precioso! — Le dice mamá antes de tomarlo del brazo cariñosamente.— Ven a cenar a casa.

— ¡Mamá! —  La regaño otra vez.

— Agradezco muchísimo su invitación, pero si JongHoon aún no lo siente conveniente, tendré que desistir de ella. —  Agradezco las amables palabras de Jiyong, me gusta, me cae bien, es genial, pero no me veo en algo tan serio con él.