Oh, cariño, tengo ganas de probar la muerte por mi misma, sentirla en su totalidad.
¿Por qué me detienes así? ¿Qué a caso no puedes mirar más allá de tu mundo y darte cuenta que el mío es solo cenizas?
Vamos, observa lo que ellos han hecho conmigo, en lo que me han convertido. Observa como es que me consumo tan lento que no te daras cuenta de cuando me fui, porque así de importante era mi lugar aquí, lugar, el cual nadie sabía de su existencia.
¿Sabes? Duele, duele cuando la gente no se toma el tiempo de mirar tu alma, no se toma un segundo para pensar que tal vez esa persona necesita ayuda.
Las cosas no van a cambiar, mi universo ya no podra estar en orden, mis estrellas no volverán a su sitio ni brillaran con tanta intensidad como antes... Mi pequeño y frágil mundo, es lo que mas me cala, cariño; porque no habrá nada que vuelva el tiempo atrás.
No habrá, quién trate con cuidado todos estos escombros, no habrá, no hay y no hubo nadie nunca, y es algo a lo que muchas personas nos tenemos que acostumbrar.
Esperar a que llegue alguien, te mire de reojo y destroce parte de ti para después irse con otro, y otro y otro más. Son cosas que no podemos cambiar, cosas con las cuales tendremos que aprender a vivir por más que calen.
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Soy Sólo Ocasional.
De TodoCartas, poesías o simples escritos con trozos de un alma rota con ganas de vivir entre escombros de amores temporales, a esas personas que ya no están o se fueron sin un adiós.