Londres, Inglaterra, Reino Unido.
26 de octubre, 2015.
Presente.
—¡Mami! ¡Él me tiene! ¡Ayúdame! —gritaba la pequeña niña mientras aquel hombre sin rostro la cargaba, secuestrándola.
—Shh... Silencio. No grites, pequeña —el desconocido dejó caer a la niña sobre un duro y vetusto colchón mientras reía con malicia—, nos divertiremos mucho —susurró, cubriéndola con lentitud.
Elena despertó sobresaltada. Esta ya era la cuarta vez en la semana que se levantaba a causa de aquella pesadilla.
Desde hace muchos años era normal en ella tener distintos sueños distorsionados, los cuales se caracterizaban primordialmente porque en todos y cada uno de ellos aparecía aquel hombre sin rostro, buscándola, vigilándola, incluso hablando con ella, pero jamás había sido uno como el de aquella última semana, en donde se veía a sí misma como una niña de al menos cinco o seis años de edad, mientras era secuestrada por él. La forma tan tenebrosa en que todo aquello se efectuaba en su cabeza simplemente le ponía la piel de gallina. Hace dos días atrás había investigado por internet, en una página de salud psicológica que encontró entre los primeros resultados, allí decía que las constantes pesadillas eran productos de estrés, paranoia o algún trauma de la infancia, todo eso le había parecido extraño. Se autoevaluó por un momento y sabía que no estaba estresada por nada, tampoco sentía paranoia, y al intentar recordar algún momento traumático de su niñez no consiguió absolutamente nada. Que Elena recordase, había tenido una infancia muy feliz y tranquila junto a su familia.
Suspiró mientras frotaba levemente sus ojos. Observó la hora en el pequeño reloj color rosa que reposaba sobre la mesita de noche junto a su cama, marcaba las seis en punto de la mañana. Perfecto, debía levantarse para estar antes de las ocho en la universidad.
Elena McFly ya era toda una dulce y linda adolescente, la cual estaba a unos días de cumplir diecisiete años. La castaña se había graduado de la preparatoria aproximadamente unos tres meses atrás, para ser exactos. Algunos de sus antiguos compañeros aún se encontraban confundidos al no saber qué carrera escogerían para su futuro, pero Elena no debía preocuparse por ello; desde hace mucho sabía que la fotografía era lo que quería hacer por el resto de su vida.
No tenía un año en concreto que denominara como la época en que se enamoró de dicho arte, ya que desde muy chica había despertado la afición, pero no fue sino hasta los catorce en que comenzó a tomarlo con más seriedad, cuando sus abuelos maternos viajaron a Londres a visitarlos, allí le obsequiaron una linda cámara para principiantes.
Elena siempre había mostrado un gran interés por el arte, y podría atribuirse gracias a Edward quien desde pequeña la había inculcado en ese mundo, pintar o tocar algún instrumento como el piano era algo que de igual modo se le daba muy bien, pero su verdadera vocación era la fotografía. Su pasatiempo favorito era salir con su cámara en la mano y apuntar el foco hacia las personas.
En algo que Elena McFly creía completamente era en que cada ser humano contaba con su propia belleza, interna y externa, y a ella le encantaba asegurarse de hacer llegar ese mensaje mediante sus fotos.
Por lo tanto, esa mañana debía ir a la Universidad de Artes de Londres. Terminaría de entregar un par de documentos para finalizar su inscripción en la Escuela de Fotografía. Era un proceso algo tedioso, pero necesario si deseaba estudiar.
Cuando se levantó entró al baño para darse una ducha caliente, posteriormente cepilló sus dientes, peinó su cabello y se colocó un suéter color rojo opaco, unos pantalones negros rasgados en las rodillas y un par de tenis blancos. Su maquillaje era sencillo, nunca le había gustado maquillarse demasiado, por lo que solo aplicó un poco de corrector, polvo compacto y rímel para sus pestañas. Cuando finalizó bajó a la cocina, en donde un exquisito aroma le dio la bienvenida.
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DEREK © #1 [✓]
Mystery / ThrillerEsa sensación que hacía estremecer a Elena McFly no era para nada un juego de su imaginación. Cuando el joven y apuesto Derek Phelps conoce a la pequeña Elena en la boda de su madre, sabe de inmediato que esa inocente niña vulnerable debe ser suya c...