Capítulo 16

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Capítulo 16:

Tomó su pasaje de vuelo, entraría por ese pasillo y su vida cambiaría por completo. Al llegar a la entrada de aquel túnel, le entregó su pasaje y pasaporte al guardia.

— Todo en órden — mencionó con su acento francés, devolviéndole ambos objetos.

Su último paso, fue desaparecer encuentran aquel túnel que lo llevaría a la desafío más grande de su vida. Muchas cosas iban a salir a la luz, tenía mucho miedo.

— Adiós París — se despidió de aquella ciudad que lo había acobiijado la gran parte de su vida.

Patinaban en grupo, la misma coreografía que al parecer, cada vez les salía mejor. Eran precisos e impecables. Al terminar la canción, los cuatro se separaron, se colocaron uno al lado del otro con los brazos cruzados.

— Muy bien, van mejorando -— comentó —. Sin embargo, hay que seguir practicando duro.

— Buen día chicos, tengo buenas noticias — entró Gary en escena —. Vamos a promocionar al Red Shark con algo grande, espeluznante y atrevido. Se denominará Red Shark festival.

— ¿El Red Shark festival? — preguntaron sonrientes los adolescentes.

  Juliana pensaba; esto puede arruinar al equipo del Roller, necesitamos hacer algo pronto.

— Pronto se acercará el open, más el festival, sería una estupenda promoción para nuestro equipo — estaba muy animado —. Así que practiquen bastante, he puesto todo lo mío en ustedes.

— No te preocupes Gary, nosotros somos los mejores — dijo en un intento de tranquilizarlo —. Y, olvídate, con Ramiro en nuestro equipo somos campeones.

— Me parece muy bien — habló —. Excelente desición Ramiro — lo señaló.

  Tenemos que acapararlos, creo que ya tengo una idea – la brasileña seguía pensativa, ideando un plan infalible para que el Roller estalle en las redes.

— Bueno, tomen un break de veinte — avisó y se marchó de la pista junto a su jefe.

Benicio le tomó la mano a la rubia argentina, arrastrándola hacia las gradas. Lo miró como si de un bicho raro se tratase, distancia es lo que quería tener con él, pero si quería lastimar a Simón no le iba a funcionar.

— ¿Qué querés? — fue directa, sin rodeos.

— Ay, bueno — rió —. Creo deberían hablar un poco más del equipo y, de nosotros, por supuesto.

— ¿Qué querés decirme? — le sonrió divertida a su otro compañero, que estaba a su costado.

— Hay que lanzar Benbar a las redes sociales.

— Benbar — el chileno y la argentina se miraron, soltaron unas carcajadas.

— Hablo enserio, sería muy buena promoción — sonrió de lado y sumergió sus manos en los bolsillos de su pantalón —. Además, recuerdo muy bien que querías lastimar a Simón.

— No te ilusiones Benicio, que yo con vos no quiero nada — lo empujó, al ver como se le acercaba cada vez más.

— ¿Ah no?, Cuando me miras pienso que sí.

— Benicio, dejá de tomar cosas que no debes tomar, vos sos lo opuesto que quiero en mi vida. No te confundas, ¿Ok? — le dijo para escaparse de esa situación fastidiosa.

  Ambas habían terminado de practicar al aire libre, les parecía mucho mejor que estar en el Red.

— No sabes amiga, la otra vez estaba hablando con Matteo y Luna nos vió. Tenía una cara espantosa, la gracia que me causó fue tremenda — soltó una risa malvada —. Creo que estoy logrando que Lutteo se separe.

— Ah, ¿Pero acaso pensaste en Lumon amiga? — preguntó mientras se quitaba sus patines.

— ¿Qué es eso? ¿Se come? — bromeó.

  Se apoyó en la pared y cerró sus ojos, puchereó al no saber que desición tomar. Volvió a mirar a la de lentes buscando en sus ojos alguna respuesta coherente.

— No lo sé Nina, aunque tienes razón cuando lo ví con Emilia algo dentro de mí despertó, y me confundí por completo — era un torbellino de emociones confusas —. A la vez siento que Simón es una simple confusión, ¿Pero por qué tengo tanto miedo de que Ámbar le haga daño?.

— ¿No es porqué simplemente es tu amigo?, me refiero a qué, sentís miedo de perderlo y de que haga lo mismo que ella, porque es tu amigo. Pero luego confundís lo que es amistad con amor.

— Pero, ¿Por qué? — pensó nuevamente en el italiano, una sonrisa pequeña se dibujó en sus labios pintados con un rosado chicle, al instante se borró al notar como su amiga le dedicaba una sonrisa divertida —. Ay no Nina, ¿Y si realmente me confundo con Simón para olvidar a Matteo?.

— Yo creo que sí — colocó una mano en su hombro como un gesto de ayuda.

— Tienes razón, Simón es solo mi amigo. Haré todo lo posible para que vuelva con Ámbar.

— ¿Vas a apoyar su relación? — dijo pérdida.

— De alguna forma tengo que emendar las cosas Nina, ya la he arruinado al besarlo. Lo único que puedo hacer es arreglar todo — se cruzó de brazos ideando un plan —. Simbar tiene que volver, y ya sé cómo.

— ¿Pero te escuchará?.

Caminó con su guitarra en mano, la mochila colgada en el hombro, y su vista pegada al celular. Esperando un mensaje que nunca iba a llegar.

¿Cómo se sentiría volver a besar sus labios y abrazarla? ¿Cómo se sentiría ser ella por un día?. Entonces fue cuando una frase le vino a la mente; No necesito a una persona que vea lo bueno en mí, necesito a alguien que vea lo malo y aún así me quiera.

Esa fue la señal necesaria.

Ya no hay Claroscuro, solo oscuridad.

❇✴❇

• ¿Cómo va el rumbo de Claroscuro? ¿Les va gustando? ¿Qué esperan por parte de cada personaje?.
• La primera en comentar " Simbar es arte", ahre, tendrá dedicatoria, y además tendrá la oportunidad de decidir la frase del capítulo siguiente.

Claroscuro©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora