Capitulo IX

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Al final e accedido a participar, ya que no me quedaba de otra, así que bueno... Me tocada participar en esa fuca cosa dentro de una semana aproximadamente o posiblemente cuando llegue el nuevo judía verde. Al final me dieron dos días libres, no se que paso, pero ahora me la paso sentada en un árbol. A veces Ben viene y habla conmigo cuando no tiene ganas de hacer nada.

-Eres un vago, lo sabes, ¿no? -Se hecha a reír.

-No puedo creer que estén haciendo eso del concurso -dice mientras ve algo a distancia.-, ¿Qué opinas tu de eso?

-Que estaban o estábamos mejor sin eso. -por primera vez en mucho tiempo me sale una sonrisa sin querer.- Nunca te agradecí por la piedra, Ben.

-Si, de eso ya me había dado cuenta.

-Así qué gracias. -de repente un pensamiento se me viene a la mente.- ¿Qué haces tu aquí?

-Soy corredor.

-¿¡Y que rayos haces aquí!? Deberías estar afuera buscando una salida de este miertero lugar y... -me relajo un poco.- ¿has sabido algo de los mapas robados?

-No -al final todo se hizo público.-, ¿tu?

-Por desgracia, no... No eh sabido nada.

Ben me agarra de los hombros. Miro al suelo por pena al pobre chico, ya se lo eh dicho millones de veces y siempre terminamos discutiendo por esto, pero... El es muy... ¿Alzado?; si yo viviera en un Claro de puras chicas y un mes de repente llega un chico lo que menos haría sería juntarme con el, aunque si me daría algo de pena verlo sólo, pero en el caso de Ben no es eso.

-Ben -digo quitando sus manos de mis hombros.-, cálmate si.

El murmura algo y se va. Me quedo sola en el bosque, el cual lo conozco como la palma de mi mano.

-¿Problemas con el novio?

-No es mi novio. Nadie lo es. -Gally sale detrás de un árbol.

-Por supuesto -me da su más desagradable sonrisa.-. Ten, aquí tienes algo para que vayas practicando para el concurso, tenemos que ganar.

Me entrega una caja pesada la dejo en el piso. Estoy a punto de decirle algo pero ya se esta yendo.
Me siento en posición de indio y abro la caja de madera. Contiene cucharas, cuerdas, algo que de seguro sirve para escalar, un silbato, un palo que simula una espada con instrucciones de uso, al igual que un arco con su carcaj de flechas de madera y adicionalmente un blanco; un mapa de todo el Claro (No creo que lo necesite), libros, comida que posiblemente este podrida, estiércol y una nota al final de todo. "Elige sabiamente lo que necesites". Agarro el arco con sus respectivas flechas y el blanco. Meto todo en la caja y la cierro.
Pongo el blanco en un roble alto y lo clavo con unos pequeños clavos que traía. Me paro a cierta distancia y trato de observar el centro del blanco; pongo la primera flecha, me paro derecha y suelto la cuerda. Primera flecha, todo un fracaso, al igual que todo el carcaj de flechas. Suelto un suspiro.

-No es tan difícil -Gally a estado parado todo el rato a cierta distancia viéndome con el arco en la mano y mis intentos fallidos.-, sólo tienes que practicar, miertera.

-No necesito tu ayuda. -pongo una flecha en el arco.

-Primero -dice acercándose a mi. No quiero estar al lado de un Gally amable.-, no pongas tan tensa la cuerda. Segundo; pon tus pies en una coordenada con tus hombros -arregla mi postura.-. Cuando pongas la flecha, ponla mirando al piso y -dice antes de darse media vuelta eh irse con la caja.- sostén la cuerda con tres dedos. Relajate y has que todo salga como debe. ¡Práctica, cara fuco!

Se va. Me quedo con la boca abierta. Me ha ayudado aunque yo me eh negado; ¡Oh Dios! En verdad quiere ganar. ¿Por qué se ha llevado la caja? Borro todos los pensamientos posibles y miro con mucho cuidado el blanco. Pongo como se debe la flecha y apunto. Suelto la cuerda y la flecha cae en el tronco, no en el blanco pero si en el tronco. Es un avance. Paso horas practicando pero soy un desastre; el cabello se me cae en toda la cara cuando la brisa pega fuerte, no puedo practicar así.

Estoy en el comedor esperando mi bandeja de comida. Hoy nos toca comer carne de vaca, con algunas verduras y jugo de algo desconocido que nadie quiere decirme, pero aún así se lo toman. Me ponen de los nervios. Busco a Gally con la mirada para preguntarle algo pero ahora que lo necesito no esta. ¿Quien más sabrá usar un arco?
Veo a Alby a unas cuantas mesas de donde esto. Espero que me den mi comida y me siento al frente de Alby. Levanta una ceja.

-¿Has visto a Gally? -toma un sorbo de ese jugo misterioso.

-¿Vas a matarlo?

-No todavía -susurro. El suelta una risa.-. ¿Lo has visto?

-No. Creo, sólo creo que está en la sala de mapas.

Miro mi bandeja y esta intacta, empiezo a comer, pero no me tomo el jugo. Comemos en silencio pero el termina primero y se pone a ver unas cuantas cosas en una libreta. Se ve de mi edad, pero de seguro tiene que actuar como alguien maduro y poner disciplina, aunque sea un poco difícil serlo. Alguien le da un puño amigable en la espalda.

-¿Qué tal las cosas en el Claro, Newt?

-Normal, cada quien haciendo de las suyas -pone su bandeja y me mira.-. Hola. -lo saludo con un simple gesto.

-¿Los creadores han mandado algo, shank? -sigue anotando cosas. Levanta la vista.

-No, tal vez el viernes, cuando nos manden las provisiones, tal vez hay llegue algo más.

-¿Mandar que? -apoyó los codos en la mesa. Ninguno me presta atención.- ¿Has visto a Gally?

-Aquí estoy, Villa amor -me sonríe y se sienta.-. ¿Qué quieres? -sus palabras muestran desagrado.

-Algo para amarrarme el cabello.

-¿Algo más?

Pienso durante un segundo las millones de preguntas y sólo una llega a mi mente, »¿Villa amor?, ¿Qué es eso?«. Todos siguen comiendo pero ninguno quita su mirada de mi rostro; de un momento a otro reacciono. Miro a Gally y el se ríe.

-¿Ya lo entendiste? -suelta una carcajada. Siento como mi cara se enrojece de rabia y busco a Ben con la mirada. Lo encuentro.

-¿Allison? -habla Newt. Alby me mira tratando de adivinar mi próximo movimiento. Me levanto y agarro mi bandeja.

-¿Qué vas a hacer? -dice Alby seriamente.

-Botar la basura.

Al final olvidaras todo de mi.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora