Al final olvidaras todo de mi.

Capitulo XX

Me levanto. Mi primer movimiento después de caer inconsciente. Me doy la vuelta y mi cuerpo descansa en una camilla con millones de cables conectados al rededor mío. Me lanzo encima de cuerpo obligándome a entrar, no puedo. Sigo intentando. Todo es inútil. Robb esta sentado en el piso al frente de mi cama con el libro de medicinas. Recuerdo que yo también lo leí. Gally esta discutiendo con un mediquero.

-¿Sabes lo que pasaría si Newt se entera? -su voz es cada vez más fuerte.

-¿Por qué a el le interesaría ella? -se cruza de brazos. Me quedo detrás del mediquero. Un chico flaco, blanco como la leche y cabello oscuro.

-No puede enterarse -agarra el pomo de la puerta.-. Te juro que si le dices algo a alguien, pequeño miertero, te mato.

Se va. Robb empieza a llorar. ¿Qué tengo?, ¿qué me pasa?, ¿estoy en coma? Mi teoría sobre los comas era que caías en un paisaje negro mientras morías. No estoy en un paisaje negro, estoy en el Claro, viendo como Gally amenaza a todo el mundo y Robb no sabe que ver. El mediquero súper enojado lo saca de la habitación y me deja a mi cuerpo sólo. Ni siquiera con un alma. Mi cara es pálida y no tengo color en las mejillas. Mi respiración es lenta, pero se que sigo viva. Se ve que sólo tengo una simple camisa de tiras que deja al descubierto tremendos morados en mis hombros y parte de mis brazos. Algo me arrastra hacia abajo. Estoy en la habitación de Newt.

-Me alegro de que te hayas recuperado.

-Si -dice el. Muerde su labio. Siempre diré que es toda una diva.-. Que raro que Allison no haya venido.

-Al parecer, esta muy ocupada en el huerto y enseñándole las cosas a Robb.

-¿No la quisieron botar al laberinto cuando llego conmigo?

-Créeme que si, muchos quisieron.

El se queda en silencio y saca el pedazo de tela de mi franela. Sigue con su sangre, no se porque lo guarda. Asqueroso coleccionista de seguro. Alby entra a la habitación con Gally detrás de el. Sigue con su cara de perro, y ahora más. Le dedica una mirada a cada uno viendo sus rostros con detenimiento. Tiene su cabello rubio sucio, muy sucio. Cada uno se sienta al lado de el. Se ve que esta incómodo. Su otro amigo se va. Yo me quedo al pie de su cama.

-¿Qué tal las cosas en el Claro, shank?

-¿Qué tal la comida? Sartén no se esmera mucho haciendo comida para acá. -añade Alby.

-Aún así sabe bien. -pasa su mirada a Gally.- ¿Paso algo?

-Nada, sólo que no soporto a los Judía verde, siempre tienen tantas preguntas.

Alguien entra. Es Minho. Esta sudado y pasa su mirada por aquellas tres personas que están hablando entre si. Alby se para corriendo a decir verdad. Newt no entiende lo que pasa y yo vuelvo a caer en una horrible oscuridad.

-¡Dale algo para que pare! -grita alguien. No puedo abrir los ojos.

-Hago todo lo que puedo, gilipullo.

Mi cuerpo recibe otra descarga eléctrica. Siento que salto en la camilla. No puedo abrir los ojos. No puedo moverme. Alguien llora. Se escuchan gritos. Quiero volver a flotar y ver como esta mi cuerpo. Intentó levantarme pero cuesta mucho más que antes. Intento de nuevo, estoy por conseguirlo.

-Me harías un gran favor si no te mueres.

Abro los ojos me inclino hacia delante. Empiezo a jadear. La habitación es igual que como la vi hace un momento. Es de día. Hay diez personas viéndome. Uno de ellos con esa cosa que hace para que el corazón vuelva a latir. Otro esta llorando. La mayoría esta serio. Gally se come las uñas. Me vuelven a acostar en la cama. Cierro los ojos. No quiero hablar ni saber lo que estaba sucediendo.

-Pensábamos que íbamos a perderte. -iba a morir. Alguien se acerca a mi y toma mi mano.

-Algunas veces todos olvidamos que tenemos días que no somos más fuertes que otros.

-¿Newt se ha enterado de algo? -mi cerebro no funciona, no manda órdenes, deja que mi lengua hable todo lo que quiera. Gally se me acerca.

-Estuviste aquí cinco días, idiota -cinco días. Mucho tiempo.-, ¿Crees que se lo diríamos?

-No, pero uno nunca sabe.

El se acerca a mi oído y pronuncia muy lentamente las palabras que siempre recordare por toda mi vida.

-No vuelvas a hacer nada estúpido, estuviste muy cerca de morir, y no creo que nadie aquí quiera verte muerta. -se despega de mi oído y se va dando un portazo.

La mayoría de los chicos del Claro vienen a verme. Hablan conmigo hasta que no les contesto más. Hacen muchas preguntas, cosas tontas, tratan de animarme, sólo les digo que vuelvan a hacer su trabajo, que yo sólo soy una persona más con algo de suerte, y ellos me hacen caso, se levantan y se van. A las únicas dos personas que quiero ver es a Eric y al pequeño Robb, creo que son los únicos con quienes me animaría de verdad.

-Llego por quien llorabas -es Minho. Tengo los ojos cerrados.-. ¿Que se siente estar muerto?

-¿Quieres descubrirlo? -añado. Ya es la segunda vez que esta aquí.

-Más adelante, tranquila.

Muchos me lo han dicho, pero yo no lo creo, no quiero recordar nada de lo que me ha pasado. Abro los ojos y me siento recostando mi espalda en la pared. El me sonríe. Sus ojos se ven más pequeño. Da risa.

-Es impresionante como...

-Ya lo se, no tienes que ser otra persona más que me lo diga, ya se que me paso. -admito. El pasa su mano por mis morados. Me quejo.

-¿Cómo te los hiciste, shank?

-No lo se, creo que cuando trate de traer a Newt o cuando me caí... ¿Quien grito mi nombre cuando caí?, ¿Sartén?

-Eric. -se levanta y revisa toda la habitación.- Iba pasando y algo le dio mala espina, así que te vio levantarte y todo eso que hiciste así que corrió hacia ti y como no pudo llegar a tiempo grito tu nombre. Muy heroico de su parte.

-¿Qué paso en estos cinco días?

-Nada. Sólo estabas en coma y luego falleciste, yo te encontré muriendo y corrí hacia donde estaba Alby que estaba con Gally y Newt así que yo te salve. De nada.

-Eres muy sarcástico a decir verdad. -trato de recordar todo lo que vi, pero la mayoría se a borrado de mi mente.- ¿Por qué no le pueden decir a Newt que fallecí?

-Sería muy impactante para el.