- ¡¡Jimin abre tu!! -grita Yoongi mientras sigue tocando su piano.
Jimin bufa enrollando una toalla en su cintura, baja las escaleras rápidamente y ve por el intercomunicador.
«Una caja» abre la puerta con precaución, recoge la caja observando al mismo tiempo a su alrededor. Quien quiera que haya dejado la caja ya no se encontraba cerca.
El rubio miraba con una ceja alzada el torso desnudo de Jimin. ¿Quién hubiera imaginado que tras esas camisas y corbatas se guardaba unos abdominales bien marcados?. Las gotas de agua aún recorrían el escultural cuerpo del pelinegro, al darle la espalda algunas cicatrices viejas llamaron su atención pero luego esta se fue a la caja que sostenía en sus manos acercándose rápidamente.
Jimin camina hasta la cocina con Yoongi siguiéndole de cerca.
- ¿Es esa caja?
Jimin la acerca a su nariz-. No sabría decirte. -la caja no tenía mal olor pero podría ser por que no estaba en descomposición.
Yoongi removió su cabello y observó como el pelinegro abría la caja. Muchos pétalos negros estaban por encima, queriendo meter su mano Jimin lo detiene negando con la cabeza.
Da vuelta la caja en el suelo, los pétalos caen con una capa gruesa de clavos oxidados pegados a una base, estaban ocultos por los pétalos.
«Mierda» Yoongi observa como Jimin se agacha removiendo la caja, encontrando una foto de los dos en su estudio abrazados en el sillón. Traga en seco al ver como había una cruz en el rostro de Jimin y la palabra "mío" Escrito sobre él.
- ¿No tenías que grabar algo hoy? -pregunta Jimin con una sonrisa.
- Hora del acto. -sonríe malicioso, la maldad en sus ojos era palpable, Yoongi no se dejaba intimidar por nadie y Jimin lo sabía.
(***)
Jimin revisaba minucioso cada rincón del estudio mientras seguía la conversación con Yoongi.
- No lo sé amor, ¿Crees que está bien que los demás se enteren?
- ¿Por qué no bebé?, eres la cosa más linda en este mundo de mierda y debes ser mío. -le seguía el juego el rubio observando cómo se movía por todo su estudio.
- Amo la oscuridad que hay en ti. -caminó hasta Yoongi mirando confundido a su alrededor, estaba seguro de que había un micrófono aquí.
- Nadie quiere mi oscuridad -la voz de Yoongi se había vuelto seria de un momento a otro, el pelinegro seguía mirando a su alrededor distraído sin notar el cambio.
- Bueno no todos están acostumbrados a ella, pero yo sé que es solo una manera de defenderte a ti mismo, tener ese lado no es tu culpa es parte de ti. -sinceró Jimin acostumbrado a tener esa conversación con su hermano.
Por la cabeza de Yoongi pasaron miles de cosas luego de escuchar aquello. Pero no era así, nadie podía amar la parte oscura de él. Eso ya estaba comprobado, resentido volvió a hablar.
- Eso es pura mierda. -murmura entre dientes.
- No es mierda, mierda es la gente que no te acepta con todo lo que eres y conllevas. Amor, la perfección no existe a menos que leas un libro, ahí está la perfección ¿por que? Pues por eso mismo, por que no existe. -se agachó debajo del mesón y sacó un mini micrófono. Yoongi observó el gran trasero de Jimin frente a él, por un momento olvidando su rabia y de lo que hablaban, hasta que el pelinegro salió de su escondite con una gran sonrisa teniendo en alto el micrófono- Ahora bésame mi amor.
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Fama (Yoonmin)
FanfictionYoongi es frío, imbécil, idiota, hipócrita y prepotente. YoonGi se acuesta con Jin, Jungkook y hope. Otros famosos. Jimin solo quiere cuidarlo por una razón.