-21-

465 83 36
                                    

''Nadie va a salvarte de ti mismo 

Y espero que te sientas mejor, 

Y nadie va a quererte si lloras por ayuda.''

Trauma - Doja Cat 


Luce exactamente como alguien que irá a hacer lo que se cree que va a hacer. 

Y Jung Kook no se había equivocado. 

Efectivamente, como Ji Min temía, me alteré apenas al pisar en la clínica. No podría explicar que fue lo que pasó por mi cabeza al momento del quiebre. La situación se había dado de esta manera: Ji Min me había acompañado desde que bajé del auto, pasando su mano por mi cintura, habíamos captado la atención de mucha gente, mayormente chicas, pues estas quedaban embelesadas con la aparente imagen de Ji Min, que no era para menos, claro. Obvio desde el principio ya había fracasado el plan, ya que esas miradas, aunque totalmente inocentes, alteraban mis sentidos, creyendo posible la opción de huir.

Entonces, con unos pasos más, estuvimos dentro del lugar. Mi cuerpo actuó por si mismo aferrándose con temor a Ji Min, algo que sabía que luego me auto-reprocharía, Ji Min no pareció recibir esto de manera agradable, puesto que sentí que su cuerpo se estremecía y su cara, aunque con un aire tierno y compasivo, lucía preocupada. Posiblemente ya se lo veía venir. 

Pero ninguna reacción fue tan alarmante como la que hizo cuando me quedé quieta en medio de la recepción. Su cara pasó a fulminarme con la mirada a la vez que me insistía con esos mismos ojos, mientras miraba a todas las direcciones, queriendo evitar llamar la atención.

Ni yo supe porque actué así, sinceramente no pretendía huir o hacer un escándalo, obviamente tendría que esforzarme luego para hacer que Ji Min me creyera, porque claramente su mirada amenazaba con unas terribles consecuencias. Pero era verdad, no lo pretendía, sencillamente la situación había sido mucho para mi y no había logrado contenerme. 

Un par de enfermeras, que por ahí pasaban, se habían acercado hacia nosotros y eso probablemente me había alterado aun más. Una de ellas colocó su mano en mi hombro al no recibir respuestas de mi parte, a una pregunta que por supuesto no había escuchado. 

Y por un instante, mis ojos se perdieron en los de la mujer, agrietándose la presa que contenía las olas, por ese instante me olvidé de Ji Min, y aunque no dije absolutamente nada, la mujer pareció leerlo de mis mismos ojos. Una mirada suspicaz fue lo que le otorgó al rubio, que cada vez lucía más perturbado, ella le sostuvo la mirada, un largo rato... Como si supiera todo. 

—¿Quieres tomar un poco de aire?—Le oí preguntar a la mujer.—¿Por qué has venido?—Preguntó nuevamente al instante. 

Ji Min abrió su boca, pero la mujer alzó una mano en su rostro sin mirarlo, enfocando su vista en mí, incluso se oyó la voz de Ji Min ser callada. 

La miré tan solo dos segundos antes de que todo mi labio inferior comenzara a temblar, mi visión ya era borrosa de las lágrimas que intentaba contener. 

—Ne-necesito ir al baño...—Fue lo que logré decirles a las dos enfermeras. 

—¿Tienes que ir ahora?—Preguntó Ji Min alarmado, queriendo sonar dulce de algún modo.

Las enfermeras alternaron las miradas entre ellas y Ji Min, luego hacia las recepcionistas que ahora también lucían alertas, incluso se habían puesto de pie, listas para reaccionar. Ji Min me miraba a mí, de manera autoritaria, como si esperara que yo cambiara de opinión.

Hasta Romperte¹ |J•J•K|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora