5.

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Doncaster era un lugar muy pequeño, y a mi parecer: muy calmado.
Las hojas caían levemente de los árboles, quedando con el cielo nublado y aquel colegio tan calmado.

Eran mediados de septiembre y el otoño estaba empezando a llegar.
La brisa no era nada leve, mi madre había dejado cinco chamarras diferentes en mi cama está mañana.
Y yo, no había traído ninguna.

-Imbesil- susurró para mí mismo

Mi primera clase, era matemáticas.
-Mejor mañana no podía- pienso sarcástico.
Las matemáticas no me parecían malas, el problema era que no las entendía.

*

Había imaginado el momento en el que entraría al salón y las personas me mirarían. Que susurrarian cosas entre ellos y me señalarían. Había imaginado aquel escenario, cientos de veces en mi cabeza la noche anterior. Pero para mí sorpresa, nada de eso pasó.

Las personas estaban en grupos, cada uno con sus respectivos amigos: algunos reían y algunos otros simplemente platicaban calmados.
Todos traian chamarras, bufandas e incluso guantes. Me sentía un imbesil junto a ellos.

-Buenos días, chicos- Una voz de un hombre detrás mío, hace que me salga de mis pensamientos. Era alto, piel blanca, ojos azules (demasiado azules), pelo negro y brilloso, y una gran sonrisa en su rostro. El maestro con el que cualquier chica soñaria.

-Dale, hombre. Toma asiento, ¿eres nuevo?- no había notado cuando esté había empezado a hablarme

-Si- respondo que apenas se me escucha. Este me dirige una sonrisa y me señala un asiento que estaba cerca de su escritorio.nAsí que me acercó al lugar, me quito mi mochila y noto que la ventana al lado mío, estaba abierta.
Provocándome un escalofrío.

-Tu nombre- de nuevo me toma por sorpresa. Yo miro al hombre de bella sonrisa y pongo una mirada tratando de decir que no había escuchado

-Tu nombre- repite sin quitar su sonrisa

-Harry-

-Claro- entonces desvía la mirada y se levanta de su asiento

-Saquen su carpeta de trabajo, voy y vengo- habla seguido de salir del salón

Mierda, si que hacía frío.
Con mis propios brazos me tapo el pecho para calmar un poco el frío que entraba por la ventana, pero no funciona.

Me concentró tanto en el frio, hasta observar como un chico se acerca a la puerta del salón, mira el número en la puerta y da una mirada adentro, seguido de entrar.

Era bajo, ojos azules, cabello color castaño y traía un abrigo largo y una bufanda roja.
Este mira entre la gente, hasta que se encuentra con mi mirada y yo la desvío. Se acerca lentamente hacia dónde me encontraba, pasa un lado mío, me da una sonrisa y se sienta detras mío.

-Quieres que cierre la ventana?- me pregunta después de unos cuantos minutos

-he?- respondo con un poco de escalofrío en mi voz.

Este se levanta de su lugar y cierra la ventana, se da la vuelta para verme y me da una sonrisa

-Me llamo Louis-

-Me llamo Harry-

¿WHAT IS HOMOPHOBIA? Harry Styles Donde viven las historias. Descúbrelo ahora