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Han pasado dos años desde que publiqué el primer capítulo de esta aventura, mi primera vez escribiendo de manera original.
Actualmente me encuentro con tal carga en la vida real que en un momento me dije que esto debería dejarlo de lado, ¿pero saben? Cada momento en que escribía en medio del estrés esto me lo quitaba porque la escritura y la lectura tienen eso mágico para mi y se que para muchos de ustedes una historia puede generarles lo mismo y quiero pensar que así fue.
Para quienes han tenido días malos, estrés o simplemente están tristes espero que esta historia haya logrado liberarlos un poco de la realidad aunque sea un momento.
Si he logrado eso, puedo decir que mi misión se cumplió.
El Cortejo de Velkan deja mucho que desear para ser una historia perfecta, ¡pero con ella he aprendido mucho! Han sido dos años de estudio, de lágrimas y de cambios en mi vida: me he atrevido a dar un paso gigante que es mostrar algo distinto a mi zona de seguridad y me he visto tan recompensada: no solo por las lecturas, me refero a sus maravillosos comentarios: los que critican, los que teorizan, los que se emocionan y me ayudan a mejorar.
¡Cada uno de ellos los he leído y los atesoro!
También los mensajes privados de aquellos que, por miedo, prefieren darme un comentario más personal y han sido maravillosos. ¡tengan por seguro que cada palabra que se tomaron la molestia de escribir me ha ayudado y lo hará en el futuro.
Nuevamente gracias, pero gracias por todo su cariño a este extraño cuento de hadas con un extraño final.
¡No me quiero despedir sin dejarles este espacio para que digan todo lo que deseen decir e invitarles a seguirme en las redes sociales que tengo a disposición de ustedes!
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