Cartas Destinadas Al Amor Que Fue Prohibido Por Dios.

¿Fuiste tu?

La familia Hamilton desayunaba tranquilamente, los niños peleaban y Alexander veia con una sonrisa a sus siete menores hijos felices en la mesa, Philip estaba en su habitación aún durmiendo al ser domingo, levanto la vista hacia alfrente de la mesa un tanto triste, ese es el sitio de Eliza, pero ella se  niega a comer con el a la mesa incluso si sus hijos le piden que los acompañen.

"Deberia pedirle perdón..." penso Alexander parandose mientras tocaban la puerta, abrio y fue empujado por una pelirroja de ojos verdes que entro con un aura asesina a la casa.

-¡Francis!-grito Angie borrando sus sonrisa al ver que la chica  se veia molesta, no, mas bien, furiosa-¿Qué paso?

-¿Dondé esta Philip?-pregunto, dio un paso alfrente cuando los niños señalaron las escaleras. Subio rapidamente haciabla habitación del chico dejando abajo de el a su padre.

-¡John! ¡¿Qué paso?!-pregunto viendo al pecoso con la respiración agitada y con lagrimas desbordando sus mejillas rojas y moretones en su rostro, signos de haber estado en una pelea.

-¡Los de la iglesia se lo llevaron, se llevaron a Kyle!-exclamo al recuperar un poco del aire que se le fue al correr hacia la casa del padre de su hijo. Las pupilas de Alexander se dilataron y lagrimas ya desbordaban de sus oscuros ojos.

-... ¡¿Qué?!-su cuerpo se erizo por completo ante la mención de tal organización-Pero ¡¿Quién fue el que los llamo?!

-Tu hijo...

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El sonido de grilletes ya viejos abriendose, un quejido de dolor retumbo por ese oscuro y oculto lugar que la iglesia tiene para "curar, restaurar y volver a la protección divina" a los que se fueron por el camino del pecado. Uno de los guardias le quito la venda de la boca y lo pateo.

-Quedate aqui.

Kyle fue arrojado a uno de esos lugares bruscamente, se levanto rapidamente para dar pelea-no pudo por el camino, estaba atado de manos y tenia un cuchillo rozandole el cuello como amenaza- pero fue muy tarde, ya habian cerrado las rejas.

-¡Abran esta maldita reja!-grito molesto, sabia porque estaba aqui, lo tenia muy en claro, pero ni de chiste queria quedarse en este lugar. Movio las rejas una vez mas, que a consecuencia del escandalo que hacia le tirarón piedras para callarlo. Kyle retrocedio al sentirlas en su cuerpo, retrocedio lo mas que pudo para que no les cayera, choco la pared y se dezliso hasta el piso, toco su corta melena que rozaba sus hombros, cortada por una espada por haber atacado a un guardia cuando se lo quisierón llevar haciendo que su padre diera pelea y su hermana tambien salga lastimada.

Se dio un golpe en su cabeza a si mismo ante eso, almenos los pequeños salieron intactos cuando el acepto ir de "buena gana" con ellos. Solto un suspiro resignandose a pasar el dia en este frio lugar.

-¿Qué hago ahora?-susurro escondiendo su rostro entre sus piernas pensando en una manera al cual escapar.

Recordaba esta mañana, su familia animada como siempre, discutiendo que podria preparar su padre esta vez cuando en eso tocaron la puerta y ni bien su padre dijo "¿Porqué lo buscan?" Le dieron un golpe y entraron a la casa cual ladron al ver joyas a su alrededor.

-Veo que aqui hay carne fresca~

Kyle alzo la vista molesto, curvo una ceja al ver a dos hombres alfrente de la reja, sus ropas eran viejas y en la cadera del soldado derecho colgaba unas llaves. Sonrio de lado y se paro de donde estaba, tenia un plan.

-¿Qué se les ofrece en este añoso lugar?-pregunto Kyle acercandose un poco donde estaban los soldados.

-Escuchame pecador, nos dieron la tarea de cuidarte hasta mañana-dijo el de la derecha jugueteando con las llaves.

-Si, ya que mañana seras arderas por las llamas del infierno, donde deberias estar ahora por hacer querer pecar a un chico-dijo el otro, un poco mas bajo y mas flaco que el amterior soldado.

"¡¿N-Nos vieron?!" Se pregunto mentalmente alarmandose, tratando de no mover ni un musculo de su rostro aunque por dentro se halla alarmado-Ja, ¿Cómo saben que es cierto esa difamación que alzarón contra mi? ¿Quién fue?

-Un tal Philip en la madrugada...

-¡Oh, ya veo!-grito alterandose levemente, pero manteniendose a la compostura. Su respiración le estaba fallando, su rostro lo sintio acalorarse y sus lagrimas estaban amenazando con salirse "No, no puede ser el, el nombre Philip es muy común..."

-Uhm, veo que eres muy lindo~

-¿Y me dices sodomita a mi?-fulmigo con la mirada al solado que movia su cabeza de arriba y abajo, como excaniando su cuerpo.

-No pecaria, seria un castigo y  un castigo ejemplar para ti, pecador-dijo uno agarrando las llaves de su cadera, pero una mano lo detuvo antes de abrir la puerta, Kyle maldijo por lo bajo al ver que aún su plan no se lleva en marcha.

-Recuerda, si te encuentran a ti asi...

-¡Entonces ve a ser de campana!-agarro del hombro a su compañero y lo tiro fuera mientras abria la reja-Te hare rogar~

Llevo una mano a su pecho y sonrio traviesamente al ver que si funciono tener linda cara.

-Estoy aqui~

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-¡¿Pero qué te pasa Francis?!-pregunto al sentir su espalda en la pared y la camisa de su cuello ser arrugada por la hermana mayor de su ex.

-¿Porqué lo hicistes?-pregunto con la voz ronca y su rostro lleno de lagrimas-¡¿Porqué acusastes a Kyle con la iglesia?!

Philip abrio los ojos confundido ante eso para luego mirarla asustado.

-...¿Qué?