Huyamos.

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-¡Abuelo!-Philip pateo la puerta bruscamente del despacho del mayor de la casa con una mirada enojada-¡Llegue!

-¿Qué quieres mocoso?-Henry volteo a verlo, dejando un libro de color azul  sobre su escritorio de color marron, su mirada verdosa era seria y aburrida. Su hijo menor estaba a su costado con varios libros en sus manos, viendo sorprendido y curioso al chico por hablarle tan irrespetuosamente a su padre y mas sorprendido del porque su padre actua tan tranquilo sin haberlo echado por su comportamiento.

-¿Quién eres tú, niño?-pregunto Henry Junior, un chico hermoso-o eso decian muchas personas, no solo las chicas- de pelo rizado hasta los hombros, castaño claro, ojos verdes, pecas muy leves, era la viva copia de su padre solo que mas liberal y una hermosa sonrisa que encantaba a cualquiera que lo heredo de su madre.

-¡Soy Philip Hamilton y vine por Kyle Laurens!

-¿Hamilton?-pregunto sorprendido, habia conocido a un hombre con ese mismo apellido, pero no creyo que fuera el padre del niño, no se parecian mucho, mas bien se parecia en demasia a su hermano mayor, eso le preocupo un poco.

-¿Y eso a mi que me importa? ¡Derek!-un hombre de gran altura y musculatura entro al lugar-Tira al chico fuera de la casa.

-Si señor.

-¡Espere, espere!

-¿Ahora que quieres?

-Quiero almenos verlo.

Henry levanto una ceja ante eso, se sento en su escritorio y se digno a mirarlo correctamente.

-Me importa un bledo tu deseo-le saco la lengua-que se largue.

-¡Hey!-se quejo sintiendo que el hombre lo cargaba y se lo llevaba.

-¡Espera, Derek!-junior detuvo al gran hombre que solo le ganaba de altura quince centimetros-Dejalo-hablo y volteo a ver a su padre-Yo me encargare de el.

"Este hombre con cara de angel me salvo" penso Philip antes de ser tirado al piso.

-Ven conmigo-Junior salio de la habitación, seguido lentamente por Philip ya levantado.

-Gracias señor por...

-Oh, no me lo agradezca-su sonrisa se agrando-Solamente quiero hablar de un tema en particular contigo en privado.

Philip por un momento sintio temor al ver el brillo en los ojos del mayor.

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-Auch, oiga señor, eso duele...-se quejo Philip al sentir una jalada de oreja por medio de los largos pasillos, se detuvo de golpe al estar frente a una puerta de color blanco.

-¡Oh, Kyle~!-canturreo divertido tocando un par de veces la puerta de la habitación de su sobrino-¡Tengo un regalo para ti!

-¿Uhm?-Kyle abrio la puerta confundido a lo que rapidamente su tio Henry, le tiro a Philip con un moño azul en su cabeza  haciendo que ambos cayeran al piso.

-¡Disfruta tu regalo de adelantado querido sobrino!-cerro la puerta pero luego la volvio a abrir-Me olvidaba, no hagan mucho ruido y Kyle, porfavor no se lo digas a tu padre que me mata-saco dos envolturas de forma cuadrada de sus bolsillo-Aun eres muy joven como para ser madre asi que tomen, si quieren mas solo ven a mi habitación-cerro la puerta llendose rapidamente de alli.

-¡Tio!-grito avergonzado parandose del piso y cerrando con seguro la puerta por si venia denuevo-¿Qué haces aqui, Philip?-pregunto volteandose, dandose cuenta que las manos del chico estaban atadas-¿Qué te hizo mi tio?

-Solo hablamos un poco...-palidecio al recordar las torturas psicologias que paso en esa habitación, alzo sus manos al chico-¿Me las desatas?

Kyle suspiro, se arrodillo a su lado y empezo a desatar sus manos-No crei que te atreverias a venir...-Philip lo miro confuso-Despues de aquella carta, bueno...

-Oh, si, mi padre hizo la carta-rio nervioso-Pero aunque aun no se que dice la carta...

-Dice, estimado señor lamento que mi hijo no podra ir ya que esta compromtido con una niña, disculpe las molestias-entrecerro los ojos-Mas la carta que tu le enviastes a mi abuelo, me prohibio extrictamente volver a verte ya que podrias lastimarme...

-Kyle, yo...-abrazo al chico.

-Tengo miedo de salir lastimado, mi apellido nunca a tenido mucha suerte en el amor ¿Sabes?-correspondio el abrazo del chico escondiendose en su pecho-Pero cuando estoy a tu lado, ese miedo desaparece en mi y solo me llena de felicidad al poder verte...

-Perdoname por enviar esa carta, estaba enfurecido y...

-No puedes hacer nada, las cosas ya estan hechas...

-Kyle-beso al chico de forma cariñosa, el mayor correspondio el beso gustoso abrazandolo por el cuello, se miraron a los ojos y sonrieron-Huyamos.









Holiiiiiii.

Cartas Destinadas Al Amor Que Fue Prohibido Por Dios.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora