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Comenzaba a amanecer, los rayos del sol se filtraban por las blancas cortinas que dejaban entrar una pequeña brisa primaveral.

SeokJin abrió levemente los ojos al escuchar la pesada alarma de su celular, la silenció y se sentó sobre la cama tras dar pequeñas acaricias circulares sobre su vientre se levantó e hizo un pequeño estiramiento de brazos caminó hasta el cuarto de baño donde allí tomó una relajante ducha.

Al terminar se puso el uniforme junto con una sudadera bastante holgada, pues Ken le recomendó usar aquello para que no se dieran cuenta del crecimiento de su estómago. Arregló su cabello y luego sonrió mirándose al espejo.

Ya listo salió de su habitación, bajó las escaleras y se dirigió a la cocina donde estaba Sun Hee, una mujer de unos 40 años aproximadamente, quien lo cuidó como si fuese su propio hijo y quien sabía de la relación de él con NamJoon.

—Buenos días. —contestó con ánimo la anciana dejando el desayuno del menor sobre la mesa- ¿Tienes dinero para comprar tu almuerzo por la tarde? -preguntó la de canas blancas.

—Sí, no te preocupes. —argumentó el de cabellos castaños con una sonrisa comenzando a beber del jugo de naranja que iba acompañado con una deliciosa sopa de verduras y algunas frutas.

La anciana se retiró para seguir con sus quehaceres mientras tanto Jin sacó su celular de su bolsillo trasero y comenzó a inspeccionar si había llegado algún mensaje reciente pero nada desde la última vez que habló con sus amigos.

Pasó al chat de su novio escribiendo un corto "Buenos días" acompañado de un emoji de café. Cliché, pero así les gustaba ser.

El mensaje no tardó en ser respondido de la misma manera lo que hizo sonreír al castaño, se quedó así un par de minutos charlando hasta inspeccionar la hora. Dejó el aparato de lado y limpió los trastos que había usado, se dirigió a su habitación donde agarró su mochila y auriculares para luego retirarse de la mansión donde vivía y así dirigirse al instituto.

El camino a la institución fue tranquilo y en el camino se encontró a su dulce niño, JungKook, quien se encontraba distraído escuchando música.

Kookie al voltearse le saludó con una sonrisa acercándose a él.

—Que sorpresa encontrarte, pensé que no vendrías por haber bebido. —dijo el mayor.

—Prefiero no hablar sobre eso. —contestó el menor poniendo los ojos en blanco a lo que SeokJin no prefirió preguntar y lo dejó pasar.

NamJoon apareció a lo lejos con una pequeña sonrisa se acercó a ambos y los saludó.

—Oh, Kookie.. ¿dónde están Tae y Hobi?

—Resaca. —contestó enseguida el menor.

—¿Y YoonGi? —alzó una ceja el de cabellos grisáceo a lo que Kookie se quedó pensativo mirando a un punto fijo tratando de recordar donde quedó su hyung.

—Pues, no me acuerdo exactamente bien.. sé que una persona se le acercó y luego de eso no recuerdo más. —argumentó mientras se encogía de hombros.

—¿Y si lo secuestraron? —preguntó Jin preocupado.

—Lo dudo, nadie aguantaría a un YoonGi ebrio —contestó Nam acariciando su cabellera—. O eso me ha contado HoSeok.

Los tres chicos decidieron no hablar mucho del tema marchando así a aburridas horas de clase.

Jin quería centrarse en la clase pero esto no se le era, estaba en el laboratorio de Biología mantenía la vista baja pues frente a él habían algunos insectos disecados dentro de frascos para que se mantuvieran intactos.

Embarazado 💘 [Namjin] PAUSADODonde viven las historias. Descúbrelo ahora