No Quiero Ser Sólo Tú Amigo (O11CE)

CORAZÓN ROTO

Narra Gabo

Un mes más había pasado desde que el entrenador nos había dado la noticia de que habría un nuevo jugador en el equipo. Así que todos comenzamos a indagar un poco sobre quién podría ser este jugar e incluso llegamos a decir nombres de quién según nosotros sería nuestro nuevo compañero.

Todos estábamos entrenando más duro de lo normal y no era de menos después de haber ganado la inter copa, y saber que pronto empezaría mos a jugar contra los mejores equipos del continente.
Durante el entrenamiento Julián estuvo presente como siempre, y cuando terminamos de entrenar Vitto se nos acercó a todos para decirnos que el nuevo integrante del equipo llegaría hoy al IAD.

Todos estábamos emocionados e impacientes por conocer a nuestro nuevo compañero, así que todos nos fuimos a los vestidores a darnos una ducha y cambiarnos de ropa; para luego ir todos a la cafetería a esperar como equipo al nuestro nuevo compañero y darle una bienvenida de lo más amigable.

Mientras esperábamos Julián se acercó a mí y tomándome de una de mis manos me alejo de la mesa que compartía con Ricky y Dede, estando alejados de todos lo único que él pudo decir me fue: no aguanto más estar así con tigo Gabo.
Para luego besarme de firma desesperada mientras yo trataba de alejarlo de mí con todas mis fuerzas no pude ya que él me tenía rodeado con todas sus fuerzas.

Al separarse de mí para tomar aire noté como el sonreía de lo más feliz, mientras todos los presentes en la cafetería miraban asombrados y perplejos todo, y cuando intenté golpearlo por lo que había hecho Julián sujeto mi brazo con fuerza y volvió a besarme nuevamente.

El beso fue interrumpido cuando escuché que alguien dejaba caer algo al suelo; así que voltee a ver quién de los chicos había tirado algo pero noté que ninguno había sido, pero en cambio todos estaban aún más sorprendidos que antes y con sus ojos en blanco y sus bocas abiertas. Así que al ver que ninguno de ellos había sido llevé mi mirada hacia donde todos y cada uno de ellos la tenían fija.

Al darme la vuelta observé a quién menos me esperaba con un rostro lleno de incertidumbre, tristeza, asombro y lágrimas callendo de sus ojos.
Al ver a Felipe parado frente a mí y en ese estado lo primero que hice fue acercarme a él, pero él con cada paso que yo daba el retrocedía dos.

Luego observé como mi mejor amigo, al chico que tanto amó en está vida se marchaba corriendo y con lágrimas en sus ojos luego de presenciar lo que Julián había hecho, Felipe se fue sin importarle dejar tiradas sus cosas.
Antes de irme corriendo detrás de él, le encargué sus cosas a Valentino.
Alcanzar a Felipe me costó más de lo normal, pero cuando al fin lo logré, y me acerqué a él para darle un abrazo él me rechazó aún con lágrimas en sus ojos.

Felipe ¿Pero que haces aquí?  ¿Por qué no me avisas te que vendrías?, Le dije preocupado al ver su estado.

¿Para que querías que te avisará que vendría?, pará que yo no viera lo que haces con tú novio. Me dijo Felipe entre lágrimas.

Felipe, él no es mí novio, le dije tratando de darle un abrazo.

?Qué no es tú novio? ¿Pero por quién me tomas Gabo? Si yo mismo e visto con mis propios ojos como te besabas con él, me dijo esquivando mi abrazo.

Vamos Felipe, no es para que reacciones así, además fue sólo un beso, beso al cual yo no correspondi, y además tu eres mi mejor amigo y bién sabes que yo te hubiera contado si estuviera saliendo con Julián, le dije desesperado.

Además yo no sé porque te estoy dando explicaciones de algo que tú bién sabes que yo no hice, se supone que somos mejores amigos y debes de confiar en mí, le dije ya al borde de la desesperación.

Tal vez ese es el problema Gabo, tal vez tú y yo realmente nunca fuimos amigos de verdad, tal vez tú tienes razón, me dijo triste.

¿De qué estás hablando Felipe?, Le pregunté asustado.

Lo que digo, es qué yo nunca te ví como un amigo, mientras tú si, y tal ves por eso nunca fuimos amigos, así qué aunque me duela en lo más profundo de mi corazón deberíamos de dejar de fingir una amistad que nunca fue real, me dijo nuevamente con lágrimas en sus ojos.

Felipe, acaso me estás diciendo que ya no somos amigos, le dijo yo con lágrimas en mis ojos.

Así es Gabo, me dijo marcando se.

Al escuchar esas palabras mi corazón se rompió en mil pedazos, pero no solamente mi corazón sino que todo mi ser; esté día había perdido al chico que realmente amó por esa estupidez de Julián, pero lo peor de todo es que nunca tuve el valor de decirle que me hubiera gustado ser más que su amigo, pero ahora ya ni eso seremos.