¡Que te seduce el zorro![1] /Yoonmin (Omegaverse)

¡Tengo miedo!

Los días de Marzo eran especiales para los Roedores y Lepóridos, porque se llevaban a cabo los festivales de agradecimiento a la sagrada Bellota, las benditas semillas de girasol y a la tierra, que proveía de los dulces vegetales y hierbas nutritivas. Por medio de juegos, competencias y celebraciones se llenaba de alegría el lugar escogido por todos los cambia-formas pertenecientes a la familia. Por lo que era común que los grupos alejados de la ciudad, emigraran al lugar de la reunión. Ese era el caso de los Jumper, que se hospedaban en ese tiempo en los hostales establecidos para los Conejos.

La señora Jumper acaba de dar a luz a dos Gazapos, tiernos y rechonchos que saltaban entre las camas en sus formas de cuatro patas y orejitas caídas, era más común que los pequeños estuvieran transmutados. El hermano mayor, quien ese año había alcanzado la adultez Lepórida a sus 15 años, era bastante delgado y débil por el repentino crecimiento que sufrió, pero se rehusó a quedarse a reposar en casa, quería presenciar la primera competencia para encontrar patitas de chocolate de sus hermanitos.

Aunque Jimin fuera muy pequeño en esos momentos, su animal interno siempre estaba totalmente desarrollado, por lo que nunca olvidaba. Los recuerdos de sus padres ese día eran nítidos, felicitándolo por haber quedado en segundo lugar en la competencia, mientras Taehyung trataba de comerse sus patitas de chocolate y Jin le hacía cariñitos entre sus orejitas. De pronto su padre movió vigorosamente su nariz, atrayendo a su pecho a su esposa a la par que le ordenaba al mayor de sus hijos esconderse.

Luego todo el caos de la situación le produjo un cuadro de pánico que bloqueo el resto de sucesos, resaltando solo una cosa, el potente aroma de las feromonas de zorros. Depredadores, a Jimin le aterraban tanto que desde la muerte de sus padres, hace 12 años atrás, los Jumper no habían vuelto a bajar a la ciudad a celebrar las festividades de Marzo. ¿Cómo se había sentido tan tranquilo y seguro en presencia de dos? Aun no lo entendía pero cuando recordaba la mirada de Yoongi parecía que ya no les temía. Ahora que no lo había visto, que el recuerdo perdía fuerza, aquellos ojos no parecían tan llamativos y la seguridad disminuía, al punto que no quería volverlo a ver.

-Supuse que estarías más emocionado ¿acaso sucedió algo?- Jin lo miraba fijamente, buscando la verdad en su mirada gacha, mientras el cachorro se debatía si exponer o no la forma en la que se sentía. Por un lado le faltaba poco para empezar a temblar, temiendo por las feromonas de Zorro que apestaban la propiedad, por el otro, igual de poderoso, quería volver a sentir la seguridad de aquellos ojos ámbar que matizaban en un espectáculo donde se aclaraban en un hermoso naranja o se oscurecían como el oro.

-Le he causado muchos problemas al señor Yoongi, tal vez este enojado conmigo-Jimin suspiro aliviado al ver que cumplió su objetivo, su hermano había rodado los ojos y bufado molesto.