Extra - Parte I

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Y así pasó un mes desde que viajaron Oscar y Fersen a Suecia, muchas cosas pasaron desde su viaje.

Al momento de llegar Sofía, la hermana de Fersen de apoderó de ella, es decir, se la llevó de la mano, le enseñó toda la mansión, le dijo que se pusiera su ropa, aunque Oscar se negó, pero al tanto insistir logró que le diera lo más cómodo de usar, ofreciéndole su amistad y que sea su confidente para las cosas que pasara con su hermano.

Cuando se separó de Sofía allí estaba Fabián, el hermano menor, totalmente fascinado por ella, con la belleza de los Fersen, pero sin la delicadeza, ni la costumbres que la experiencia va puliendo en la persona, la seguía en donde podía, esto incomodaba tanto a Oscar como a Fersen.

Oscar - Fersen puedo hablar contigo a solas.

Fabián – Ajá cuidadito hermano que te estoy vigilando.

Fersen – Fabián, por un minuto te puedes comportar como un caballero, por favor. Vamos a mi despacho por favor.

En el despacho, él cerró la puerta, dejando a Fabián con cara de molesto, esas palabras lo detenían aunque ya se empezó a cansar de ellas ya que desde que Oscar está viviendo en su casa, las escucha a cada momento.

Fersen – Si dime Oscar, pero disculpa, te puedo pedir algo, mira mi apellido es Fersen, pero ahora en mi casa deberías llamarme por mi nombre Axel, me alegraría mucho que lo hicieras, ya que solo a mí me llamas así.

Oscar – Bueno Axel, lo que yo quería conversar contigo es lo siguiente, quiero pedirte un favor enorme, mira he estado por un mes aquí, pero sabes, me conoces, sabes que lo que más deseo y siempre he querido es mi libertad. Por eso he visto un lugar cerca de aquí en donde vivir.

Fersen – No Oscar, por favor no te vayas, sabes te necesito, me di cuenta de eso hablaré seriamente con ellos, mira el poco tiempo que estamos solos, tú me acogiste en tu casa por un tiempo y quiero hacer lo mismo, sabes, hagamos algo solo los dos, vámonos en este momento a pasear, dejemos todo y así como estamos, ya que hace buen clima, tengamos un día solo para los dos, haremos lo que tú quieras. Por favor ..... no te marches de aquí, te lo suplico – se puso de rodillas

Oscar – Qué haces, no, párate, está bien te daré unos días, si no cambia me iré.

Fersen – Gracias, Oscar y prepárate para ir a dar un paseo los dos.

Esperó a que ella saliera de donde estaban y llamó a sus hermanos.

Fersen – Quiero conversar seriamente con ustedes, por su culpa Oscar se quiere ir, así que o se comportan como caballero y dama o se las verán conmigo.

Sofía – Oh no pensé que eso la iba a molestar, me disculparé con ella.

Fabián – Hermano eso lo dices para quedarte con ella, pero igual ya no la molestaré tanto.

Fersen – Más les vale, además deberían saber, Oscar no le gusta mucho que la atiendan tanto, siempre ha sido independiente, cuando vivíamos juntos respetaba los momentos de soledad de ella, y aquí no los tiene, así que por favor no la molesten tanto con sus cumplidos, entendido Fabián?

Fabián – Si, está bien, pero te estaré mirando no te aproveches de ella.

Justo estaba saliendo Oscar con sus cosas listas para el paseo, al escuchar la voz enérgica de Fersen, y se ocultó para que no la vieran.

Fersen – A ver aclaremos esto de una vez, Oscar ha pasado muchas cosas en Francia, vino aquí para estar aquí en tranquilidad y ser feliz, no niego que estoy enamorado de ella, pero no la obligaré a nada, así que hermano aléjate de ella, la he protegido con mi vida y lo seguiré haciendo siempre así tenga que ponerte en tu sitio, entendido?

Fabián – Este, si Axel, entendido, y si me he dado cuenta de eso, y que ella también tiene atracción hacia ti, pero pensé que podía lograr conquistarla.

Fersen – Pero ella no es como las demás, así que quítate ese objetivo. Sino ya sabes me tendrás de enemigo.

Fabián – Si, si hermano, ya entendí.

Oscar esperó a que retiraran, Fersen estaba pensativo y se asombró que ella estuviera lista y con un ligero rubor en sus pómulos.

Fersen – Bueno, nos vamos.

Oscar – Si, claro.

Subieron al carruaje, que los estaba esperando, y salieron rápidamente de la mansión.

Fersen – Dime Oscar, donde quieres ir, eres libre de elegir el lugar donde estaremos tranquilos.

Oscar – Bueno, no conozco mucho, por esta vez te dejaré elegir por mi. – Dijo esto guiñándole un ojo.

Fersen – Jajaja, me parece excelente elección. Cochero vamos al lugar que le hablé.

Cochero – Esta bien, señor.

Recorrieron unos bellos campos llenos de flores, Fersen al ver la expresión de alegría y sorpresa en el rostro de Oscar, hizo detener el carruaje. Los dos bajaron y Oscar avanzaba sintiendo con sus manos y brazos todas las plantas y flores que tocaba, se detuvo a oler algunas de ellas, las cuales nunca había visto.

Fersen, estaba muy contento, allí veía un aspecto de ella que casi nadie sabía, el lado delicado, sensible y femenino de Oscar.

Ella ya había dado la vuelta, y con una gran sonrisa regresaba al carruaje.

Oscar – Oh Axel, es muy lindo, muchas gracias.

Fersen – De nada, y eso que sólo es el camino. – Dijo esto sonriendo y tomándola de la mano para que subiera al coche, claro que no necesitaba hacerlo, pero quería comenzar a propiciar algo entre ellos, pero nada apresurado, todo al nivel de ella.

Continuará........

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Qué pasará en este viaje?

Bueno, antes que nada agradecer a todos por llegar a las 1000 vistas, muchas gracias a todos.

Perdonen la demora, estaba esperando más respuestas para seguir escribiendo, sus palabras de aliento y mensajes son muy importantes para mi.

Ahora sigo escribiendo, de a pocos, espero que les guste y espero sus comentarios

Hasta muy pronto. 

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