Is it hate or love? | KLANCE

nueve | good day.

Keith se había despertado ese día con una llamada telefonica de un número desconocido, la cual normalmente él habría rechazado e incluso estuvo apunto de hacerlo, pero cuando recordó que él estaba esperando una respuesta por parte de los lugares en donde había dejado una solicitud de empleo deslizó su dedo hasta el icono verde que atendía la llamada.

Él había sido contratado en algún lugar llamado "Altean Palace", Keith no recordaba en que consistía el lugar o que vendían, pero eso no parecía importarle, porque mas tarde ese día iría para firmar el contrato y recibir pequeñas instrucciones, ya que él debía comenzar a trabajar a partir de mañana. Keith se encontraba motivado, no, no solo eso, emocionado y esperanzado por haber sido aceptado en algún trabajo. Él había trabajado antes, pero nunca antes lo había hecho para un motivo personal como el adquirir una motocicleta, lo que hacía que esta vez fuese distinta.

"Apuesto a que eres el único chico de 16 que se emociona tanto como tú por encontrar un empleo". Le dijo Shiro en el auto de camino a clases mas tarde esa mañana. "¿De verdad no recuerdas ni un poco de que era el lugar? AlteanPalace, no me suena de nada, ni siquiera da una idea para saber que venden". Keith negó con la cabeza, él había tenido la intención de buscar en internet por el lugar, pero se le había hecho tarde y no había tenido tiempo.

"No, dejé demasiadas solicitudes que ni recuerdo en los lugares en donde lo hice".

"¿Y qué si se trata de, no sé, una estetica canina? Dios, no, tú eres pesimo con los animales. Espero de verdad que no sea una estetica canina".

"Yo jamás dejaría una solicitud de empleo en un lugar así, y los animales me odian, no es culpa mía".

"Bueno, no eres muy amable con ellos que digamos". Shiro recordaba como Keith solía dejar caer a sus perros cuando él venía de visita a su casa. "Pero, ¿y qué si es un lugar horrible? ¿No pensaste en eso?" Comentó el mayor mientras estacionaba el auto junto con otros mas pertenecientes a alumnos y maestros.

"No lo sé realmente, pero..." Respondió Keith bajandose del auto y poniendo su mochila sobre su hombro derecho. "No sé, cualquier lugar está bien supongo. Solo sé que voy a estar haciendo algo por las tardes, y en estos momentos estar ocupado es mas como algo bueno, tener todo este tiempo para pensar en... en todo, en mi vida, no ayuda, siento que solo consigo deprimirme mas". El menor no se había dado cuenta en que momento sus palabras habían comenzado a sonar tan sombrías hasta que notó como el cuerpo de su amigo se tensaba. "Lamento eso, no quise incomodarte. Pero sí: en resumen, nada, nada va a ser que la idea de conseguir un empleo sea arruinada. Apuesto a que hoy será un buen día".

Shiro asintió, un poco contento de ver a su amigo feliz por una banalidad como aquella, aunque escucharle decir que pensar en su propia vida lo deprimía, lo hacia querer abrazarlo y chillar hasta secarse, pero incluso aunque Shiro conocía muy bien a su amigo, nunca había descubierto como consolarle sin hacer que Keith se echara a correr o reaccionará de una mala manera.

"Hoy será un buen día, hombre, lo sentí igual desde que me desperté y mi cabello no lucía horrendo, ¿sabes cuántas veces consigo que mi cabello no parezca como una enredadera por las mañanas?" Keith no podía imaginarse cómo es que el cabello de Shiro pudiese lucir mal, en cambio, el pelinegro si sabía de lo que hablaba; bueno, él tenía un greñero, así que por las mañanas, Keith y su propio cabello tenían un acuerdo de odio mutuo.

"¿Estás hablando de tu cabello?" Preguntó Matt acercándose a ambos chicos, poniéndose en medio y deslizando un brazo en cada uno de ellos sobre sus hombros. Keith tuvo el instinto de empujarle lejos ya que el contacto físico de personas a las que conocía poco le molestaba, pero se sorprendió a sí mismo dejándole hacer aquello y seguir caminando en esa posición sin argumentar nada.