- ¿Segura que prefieres hablar con tu hermano sola?- asentí
- Puedo con él- la verdad es que no podré contenerlo pero hare mi mayor esfuerzo.
- No me convences pero cualquier cosa me llamas y estaré contigo en menos de cinco minutos- le di un casto beso en los labios- te amo Ada, más de lo que te imaginas-
****Alexander****
- Me alegra poder interactuar directamente con usted señor Alexander- dijo el representante del tipo al que busco ósea a Cristian, que es un tipo joven según yo, digo es mayor que yo, la verdad no se por cuanto pero se que no es un viejo.
- No podría decir lo mismo de ustedes sin ofender claramente- asintió- me gustaría también hablar frente a frente con su jefe- hable poniendo las manos detrás.
Tenía a cada lado a mis hombres de confianza entre ellos estaba Ricardo y el otro tipo no recuerdo el nombre.
- Sabe como funciona esto, hasta que mi jefe no tenga la seguridad no se mostrará ante usted- asentí con una sonrisa falsa.
- Creo que no quedará de otra, ya que me interesa de sobre manera trabajar con ustedes- mientras crean que me tienen en sus manos mejor para mi.
- Siempre es un gusto hacer negocios con usted, estaremos en contacto para que nos vaya mandando la plata, con respecto a lo que venda- me tendió la mano y la acepté.
- Lo mismo digo y no se preocupe Ricardo se comunicará para hablar de ese tema- y se fue.
Nos devolvimos al galpón, esta vez sólo Ricardo y yo.
- ¿Estas listo para esto?- le pregunte. Asintió- Tu lo seguirás por la parte este mientras que yo hare por al oeste ¿claro?-
- Si.
- En marcha- hable.
Mi plan era tan simple como seguirlo y poder dar con el paradero de este tipo, de verdad quiero acabar con este idiota ya, no soporto que esté en libertad ni un maldito momento más.
Este tipo era muy raro, en vez de irse en un auto se iba a pie por medio del bosque. Algo no me calza.
Lo veía pero algo le decía que no iba sale bien esto. Mientras que Ricardo lo seguía de cerca yo hacia lo mismo hasta que desapareció de mi campo de visión, camine unos pasó más sin ver nada hasta que sentí algo duro en mi sien
- Creo que deje bastante claro que el jefe decidirá- maldito, no sabe lo que le hare al malnacido cuando lo encuentre.
- Será mejor que bajes eso- hablo mi mano derecha apuntándole a la sien también.
- ¡Chicos!- gritó el representante del maldito y aparecieron mochos hombres apuntándonos. Genial.
- Esta bien, creo que esto no es necesario- me iba a rendir pero Ricardo negó con la cabeza- suéltame y haremos como que nada pasó- hable frío y se rio sarcásticamente- si quieres que todos tus hombres salgan vivos de aquí, dejarás pasar esto- No se si es peor que pero algo me decía que Ricardo tenía un plan o mejor dicho había algo que no me había dicho.
- ¿O si no que?- pregunto desafiante.
- Morirán- hable natural, mientras me sentaba en un tronco cortado despreocupadamente.
- ¿A que te refieres ??-
- Que Ricardo te lo explique- lo miro.
- Un solo disparó bastará para que todos los hombres que en estos momento los tienen rodeados bastará para que maten a cada unos de ustedes- verdad o no me da igual.

ESTÁS LEYENDO
Reglas para una vida " perfecta"
Ficção AdolescenteN°1: Hacer siempre lo que debes y no lo que quieras. N°2: Ser el orgullo de tus padres. N°3: Obtener siempre las mejores calificaciones. N°4: No salir a fiesta. N°5: Solo puedes tener amigas, nada de chicos. N°6: Primero cabeza y después corazón. Y...