Reglas para una vida " perfecta"

Capitulo 11 : Tal vez sea lo mejor

- Ada vamos abre la maldita puerta- hace como una hora que estaba metida en el baño, ya que después que corrí me dirigí al baño de invitados- Ada, aunque estemos aquí toda la noche no desistiremos, nos dirás que está pasando con Alexander- ¿qué?, ¿cómo saben que se trata de él?.

- ¡¿Qué !?- escuche risas del otro lado- no se rían, aparte no sé que tiene que ver él en todo esto-.

- Abrirás y nos dirás todo lo que a estado pasando entre él y tú por qué sabemos mucho - ni modo iba a tener que abrirles y contarles. Abrí con cuidado, al ver sus caras no eran muy lindas, se veían furiosas.

- Ven para acá maldita tonta- Daniela me tomo del brazo, mejor dicho me arrastró hasta mi pieza.

- ¡Ya!- grite.

- Nos vas a decir todo lo que pasó con el sobrino del director- habló sería Carla. Asentí.

Y así les empecé a relatar todo lo que había pasado, pero del verbo todo hasta la más mínima cosa,  ya que amarrada a una silla y diciéndote que si no cuentas todo con lujo de detalles no volverás a comer es lo peor que le pueden hacer a una persona y en especial a mi.

- Ya es todo ¿me sueltan?- se miraron y lo pensaron un poco.

- Primero una cosa más- dijo Carla, la mire impaciente- ¿te estás enamo...- .

- ¡No!- la interrumpí antes de que dijera una estupidez- vuelves a decir algo así y juro que soy capas de olvidarme que estoy amarrada y te mato a golpes- hable muy enojada.

- Yia tranquila fiera, tenía que medio preguntar- la mire sin entender- por qué no me dejaste terminar. Asentí.

- ¿Entonces si ahora?- pregunté ya cansada de toda esto. Sin más Daniela me desató y pude sentir mis muñecas que dolía de una manera por estar casi tres horas contándoles a estas par de chismosas pero lo que me causaba más confusión era como se hacía enterado de lo que realmente me pasaba, ósea les conté lo primero pero jamás les dije fue sentía algo fuerte por el, pero en fin me lo dirán.

- Una pregunta- asintieron- ¿cómo supieron que algo pasaba entre él y yo?, quiero decir ¿cómo supieron que no era enfermedad por lo que no iba?- pregunté tirándome a la cama. Se miraron de forma cómplice y como preguntándose si decirme o no - ¿y...?- me volvieron a mirar.

- Alexander- me quedé helada al escuchar su nombre y no en mis pensamientos- nos habló un poco por qué quería saber cómo estabas- él a intentado saber de mí por otros medio ¿será que si le importo?- hasta nos contó que había intentado  entrar aquí pero dijo que era una maldita fortaleza- Dios mío.

- Chicas necesito un celular - me miraron un tanto dudosas, bueno hasta yo lo estaba con toda esta preocupación que tenía por el apestoso ni yo lo entendía. Daniela me pasó su celular.

- ¿Para qué lo quieres?- preguntó Carla.

- Como se habrán dado cuenta mi hermano me quito el mío- finalice , buscando el número de Alexander en el móvil de mi amiga, pero no lo encontré así que lo escribí, se preguntarán si me lo sé de memoria pues si.

- ¿Alo?- escuche del otro lado de la línea. Mi corazón dio mil vueltas al escuchar su voz y de repente de recordé todo lo que debía ser, ¿que era lo que estaba pasando conmigo?, yo no era así, yo no me dejaba llevar por mis emociones y en realidad nunca tuve que combatir con eso ya que nunca llegue a sentir algo así por alguien de esta manera, pero como siempre digo no importó lo que yo quiera- Alo, ¿hay alguien?- no puedo dejar todo por alguien que no deja nada por mí y si lo hiciera nada tiene sentido, no puedo entregar todo por una persona que llevo pocos meses de conocer, tengo que dejar de hacer esto que estoy haciendo, he estado sufriendo por una persona de la cual no sé nada, por el simple hecho de que me hace sentir como nadie lo había logrado, todo por un maldito sentimiento que no debería estar en mi- si hay alguien por favor conteste- y después de eso surgió la gran pregunta ¿esto es lo que quiero para mí?, ¿esto es por lo que he estado luchando durante tanto tiempo? ¿para que de repente llegue un tipo y me haga olvidar todo lo que me sostenido y nunca me ha dejado?, ¿solo por experimentar? Tal vez me allá buscado y allá intentado estar cerca mío pero eso no cambia nada no sé nada de él, lo encontré en una plaza donde casi muero apuñalada, y ahí está otra vez la pregunta ¿esto es lo que quiero? Ya no quiero experimentar más, solo debo volver a mi zona de confort de donde nunca debí haber salido donde todo ha sido seguro por años, no volveré a salir de ahí, no más. Corte la llamada, las chicas me miraron sin entender.