No deberían existir.

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Al día siguiente de aquello. Xion me dijo que volvería a Villa Crepúsculo a ver a Roxas. No quería que él la viera a ella, así que solo seria a distancia.
La seguí poco después de que ella se fue, pero también me quede a una distancia razonable. Ambos sabíamos que había una alta probabilidad de qué la encontrarán, y así fue. Roxas notó su presencia y empezó a ir detrás de ella. Le dio alcancé.

—No puedo volver — le dijo ella.

Cuando él tomó su brazo, ella sacó su llave espada contra él, pero con quien peleó fue contra él otro. Al final la capturaron.
La verdad no me extraña en absoluto. Deben de tener órdenes de llevarla de vuelta. Tampoco estoy preocupado, ella sabe que tiene una decisión que tomar.

Me he quedado dos días en el Mundo Inexistente. No me he acercado al castillo, pero si que lo observó. Puedo ver aquella luna en forma de corazón... Kingdom Hearts, y se que ella también puede verla.

Decido volver a donde DiZ y darle las últimas novedades. Pero he llegado en mal momento.

Me dirijo a donde yace la cápsula donde se encuentra Sora, pero puedo escuchar algo antes de entrar.

—Lo sabes muy bien, Naminé.
—Si...

Su tono de voz era bastante triste. No se que es lo que le ha dicho, pero es obvio que ella no quería escucharlo.

DiZ sale de la habitación y se topa conmigo. Le digo todo lo que sé, omitiendo la parte de los días que Xion se ha quedado a mi lado. Se que si se entera se molestará porque no le he traído conmigo, pero quiero que esta sea la decisión de ella.

Al terminar, vuelvo a la habitación de la cápsula. Naminé aún sigue allí.

—Hola — le digo.
—Ella me sonríe — Bienvenido otra vez.
—¿Alguna novedad?
— su mirada se torna triste — Su memoria se ha detenido. Ningún recuerdo esta volviendo a él.
—¿Tenemos tiempo límite?
—DiZ comienza a desesperarse si te refieres a eso. Prácticamente ha ordenado eliminar a Roxas.
—Si, me lo mencionó.
—¿Que tal te fue a ti?
—Hable con ella. Se lo pensará, el volver a Sora. Pero la Organización la tiene de vuelta en su poder.
—¿De vuelta?
—Había escapado. Por lo visto revisó los archivos de la Organización, visitó el Castillo del Olvido y se enteró de la verdad.
—¿Ella te lo dijo, eh? No te preocupes, no se lo diré a DiZ.
—¿Como sabes que no se lo mencione?
—No lo sabía, solo lo esperaba.
—...¿Puedo hacerte una pregunta?
—Si
—Escuche algo antes de que DiZ saliera. Por tu tono, no fue algo muy agradable, ¿cierto?
—Ella agachó su cabeza —Solo dijo la verdad.
—¿Que verdad?
—...La verdad acerca de los Incorpóreos — levantó su mirada hacia la cápsula — No deberían existir.

No hay que darle muchas vueltas al asunto, para ver el porque esas palabras le dolían tanto.

—...¿Lo harás? Traerás a Roxas para que se una a Sora, ¿verdad?
—Probablemente luche con él. Parece bastante fuerte, así que...esperó cualquier cosa de esa pelea.

Ambos nos quedamos viendo la cápsula un rato más.
Su despertar ya se había retrasado mucho. Hace poco, cumplió los 15 años.

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