{He Returned} Nalu Fanfiction

Capítulo 19

19

Decidí acercarme a mi taquilla a pesar de que no dejara de mirarme.

"No le mires. No le mires. No le mires"

Era difícil coger y sacar libros cuando esos ojos jades estaban posados en mí. Tampoco podía pronunciar ninguna palabra, al igual que él no hablaba. Estábamos sumidos en un silencio en el que era incapaz de realizar un mínimo movimiento. Esa maldita mirada.

Concentrada, movía los cuadernos con cuidado de no caerse, ya que bajo sus ojos podía volverme la persona más torpe del mundo.

Tras haber dado por acabada mi misión, me disponía a cerrar la taquilla. No pude hacerlo. Una mano la cerró de un golpe fuerte, totalmente inesperado y austándome un poco del susto. El causante se situaba delante mío, muy próximo a mí, con la cabeza inclinada hacia abajo y tapando sus ojos con algunos pelos rosas alborotados.

Todo esto, en un silencio absoluto, hasta que lo rompió.

— Dime Luce, —levantó la cara lentamente, y una vez más, su mirada conectó con la mía— ¿puede él hacerte esto?

¿Por qué su voz sonaba tan grave y sexy al mismo tiempo? Entre mi cara sonrojada y mi corazón apunto de explotar, pensaba que iba a caerme al suelo. Me extrañó su pregunta. ¿Él? ¿Hacerme qué?. No pude sostenerlo más y aparté mi mirada al suelo. De repente, mi respiración se agitó y tuve que inspirar y respirar más despacio, como me enseó Macao. Diablos. Con solo tal cercanía hacía que me sintiera así. Definitivamente, parecía una bomba de relojería a su lado.

Tomé un suspiro.

— ¿Qué quieres decir? —A pesar de intentar tomar el control sobre mi cuerpo, fue un completo error. Mi voz sonaba más nerviosa y parecía que me costaba hablar.

El pelirosa soltó un pequeña risa.

— ¿Puede Loke... —tomó una pausa y en ese instante sabía por dónde se dirijía el asunto— hacerte sentir que no puedes moverte bajo su mirada?¿Que no puedas respirar normalmente o sentir que el corazón se vaya a salir del cuerpo a su lado?

Estaba segura de que si seguía así iba a desmayarme. Llevé una mano a mi pecho y la apreté, sabiendo que mi cuerpo estaba acelerado. ¿Cómo demonios sabía exactamente mi estado? Con solo verme era capaz de saberlo, mis acciones eran muy obvias. Odiaba ser tan transparente ante él.

— Lo sabía, Luce. No has cambiado. Antes no podías sostener mi mirada y ahora es igual.—Me miró con una sonrisa tierna— Te extrañaba.

Fue en ese momento en el que decidí hablar, o al menos, intentar articular palabra. Una imagen de Lissana apareció en mi mente y sentí como mi cuerpo se revolvía.

— N-No es verdad —un hilo de voz se hizo sonar. No le miraba, pero estaba segura de que su cara tenía una expresión de confusión—. No te creo. Si hubiera sido así, entonces habrías permanecido a mi lado.

Mis libros sonaron al caer y puede que notara que estaba a punto de caerme yo también debido a que me abrazó. Apoyé mi cabeza en su hombro y colocó una mano en mi cabeza para que supiera que podía descansar a su lado. Le respondí gustosa. Hacía mucho tiempo que no teníamos un momento así, y lo necesitaba. Noté como poco a poco se separaba de mí y un vacío llenaba mi cuerpo por su ausencia. Subí mi mirada para encontrarme con la suya. Podía jurar que sus ojos jades transmitían añoro. Esas esferas que me volvían loca.

— Idiota, Lissana no tiene nada que ver en esto— dio en el clavo sobre lo que pensaba. ¿Acaso eso podía explicar aquel roce que tuvieron?

Mi voz se quebraba de nuevo.