Capítulo 10.

2.4K 319 334
                                    

Los días de Harry habían pasado lentos y tortuosos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Los días de Harry habían pasado lentos y tortuosos.

No veía a Louis hace tres días luego de lo ocurrido en el estudio aquella vez.

Sí, habían sido tres días, pero a Harry le parecían tres años.

Apenas había estado durmiendo pensando en el hecho; ¿acaso había hecho algo mal?, ¿no había cepillado sus dientes?, ¿tenía el rostro sucio?

Bufó. Eran las nueve pm. y estaba dentro de su cama con su perro al lado y Jazmín caminando de un lado para otro en la habitación, pero ni siquiera eso lograba sacarle alguna sonrisa como usualmente sucedía.

No se había levantado ni salido de su habitación más que para darse una ducha, cepillar sus dientes o comer algo y, si es que comía, era bastante poco.

El golpe le había dado duro al darse cuenta que Louis realmente le gustaba, pero a pesar de sus intentos por hacerlo sentir cómodo, parecía ser que el sentimiento no era correspondido y eso le jodía lo suficiente como para deprimirse el tiempo que fuese necesario.

El timbre sonó y fingió no oírlo, sin embargo, cuando el sonido apareció por segunda vez, el Señor Pepinillo se levantó de su lado y comenzó a olisquear su rostro como una señal para que fuese a atender la puerta, ¿quién sería a estas horas de la noche?

— Eres bastante molesto, ¿ya te lo habían dicho? — con una mano alejó el hocico de su mascota de su rostro y se sentó en la cama soltando un suspiro de odio.

Se levantó lentamente, sintiendo cómo una nube negra a punto de comenzar una lluvia torrencial únicamente sobre su cabeza se aproximaba. El sonido del timbre ahora se habían transformado en insistentes golpes en su puerta.

— ¡Que ya van! — gritó con expresión de enojo mientras se colocaba su bata y se aproximaba a la puerta susurrando — Qué clase de estúpida e inconsciente gente viene a jod... —

— ¡Harry! — Louis, apenas la puerta fue abierta, se lanzó sin previo aviso hasta los brazos del más alto pasando sus manos por detrás de la cabeza del rizado en un abrazo bastante apretado.

Harry no sabía qué hacer más que tratar de cerrar la puerta para que nadie fuese a verlos o interrumpirlos. De pronto su nube de odio se había dispersado y tenía al chico más lindo del mundo colgando de su cuello, ¿qué estaba sucediendo?

A pesar de su confusión, el ojiverde cerró sus ojos y abrazó a Louis con la misma intensidad desde la cintura, envolviendo todo su cuerpo mientras ocultaba su rostro en el cuello del más bajo formando una sonrisa.

Después de unos segundos, Louis, sin romper el abrazo, tomó el rostro de Harry entre sus manos y le dio un beso que nadie jamás podría esperar, ni siquiera él, pero ya no había vuelta atrás.

Harry estaba realmente confundido y sorprendido, de hecho, no pudo corresponder hasta, por lo menos, tres segundos más tarde iniciada la interacción.

Gucci INK. [Larry Stylinson L.S.] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora