¿Has sentido las ganas de besar a alguien? Pero ganas en verdad... De esas que te consumen por dentro, esas que podrían quemarte en vida, esas que parece imposible resistir.
Esas ganas de besar a alguien, aun sabiendo que no deberías, ese deseo que provoca lo prohibido. Ese pequeño sentimiento que te arrastra al abismo, ese complejo masoquista, ese deseo que emana de aquello que pude lastimar, y que aun sabiéndolo, no lo puedes dejar.
Y ese que así son los humanos, un tanto ¿Cómo decirlo? Idiotas, si idiotas, que aun sabiendo que les hará daño sé acercan, aun sabiendo que no te quiere te enamoras, aun sabiendo que es malo lo pruebas, aun sabiendo que termina en la muerte lo persigues.
El complejo masoquista.