Capitulo 24

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  -Claro Bradlye, ¿A que hora te parece bien vernos? -Digo ahora un poco desanimada, gracias señor Grey por hacer que mis animos decayeran.

-¿Por qué no mejor me das tu dirección y yo paso por ti?- pregunta aún tímido. 

¿Y dejarlo a merced de papá? ¡NI LOCA!

-Escucha creo que ser mejor que nos vemos allá, ya sabes para ahorrarnos el tiempo de que tengas que venir hasta mi casa y después ir de regreso -mi tono es nervioso y realmente espero que no lo note o al menos no dentro de los posible.

-Mmm.., Me parece mejor que vaya por ti y no tengas que irte sola y exponerte a algún peligro, ademas mis padres criaron a un caballero que pueda por lo menos ir a por la chica y demostrarle con ese tipo de pequeños detalles que le gusta- Dice con voz convincente.

¿Acaba de decirme que le gusto o fue imaginación mía?

Dios realmente no creo que pueda hacerlo cambiar de opinión.

-Esta bien- Respondo con una sonrisa.

-Ok, mira haremos esto, me pasas tu dirección por mensaje y nos veremos a las ocho, te pondrás mucho mas linda que de costumbre y nos divertiremos un rato ¿Que te parece?- Es tan lindo.

Me sonrojo por su comentarios respecto a que soy linda, es sin duda alguna encantador

-Me parece perfecto- Dios, no puedo dejar de sonreír.

-Entonces nos vemos luego.

-Nos vemos luego-respondo y cuelgo.

De inmediato corro gritando por mi madre ¡Necesito su ayuda!

-¡Mamá!- grito a todo pulmón.

Cuando salgo de la habitación, veo a mis padres salir de la suya, mi madre esta completamente despeinada y sonrojada tremendamente, mi padre tiene la camiseta mal abrochada y muy arrugada.

pero ¿Que rayos?, ¿Que les paso?

-¿Que pasa? Ana ¿Que te paso?-pregunta mi madre preocupada. Mierda creo que los asuste un poquito.

-Nada- miro a mi padre con nerviosismo- solo necesito hablar contigo de algo.

Mi madre me observa con una mirada que proyecta solo ternura y comprensible de inmediato.

-Claro cariño, dame solo unos segundos y estaré contigo ¿Vale?

-Vale- respondo aliviada.

Mamá llega unos minutos despúes de mi, me observa con cariño mientras me hace una señal para sentarme junto a ella en la cama.

-Muy bien cariño comencemos por el principio cuentamelo todo.

*******

TRES SEMANAS DESPUÉS.

Las cosas con Bradly había ido bastante bien, cada vez salíamos con mas frecuencia y al parecer le caía bien a mis padres. Entonces no entiendo lo que sucedió. Hubo buenos besos, besos bastante intensos y para nada inocentes, hubo momentos sumamente divertidos en el cine en el centro comercial, en alguna plaza o heladería, el había sido sumamente dulce conmigo, sobre todo cuando me habia pedido ser su novia y yo le pedí  tiempo, porque vamos el chico en realidad me gustaba pero muy para mi mal yo seguía pensando en Christian. Bradly fue muy paciente y reiteró cuan dulce es cuando le explique las cosas.

¿Qué rayos paso entonces?

¿Fue todo una mentira y me dijo que no había problema por el tiempo co n tal de no hacerme sentir mal?

Rayos.

Maldito seas Bradly, trato de relajarme pero simplemente no lo logro, no puedo entender su comportamiento un día estábamos bien y al otro simplemente dejo de enviar textos, de llamar, dejo de visitarme y evitaba cualquier acercamiento conmigo.

A los tres días de los que no se reporto fui a visitarlo a su casa para ver si estaba bien  ya que me encontraba muy preocupada pensando que algo tenia que haberle pasado, me lleve una sorpresa cuando lo vi en su cochera, cuando grite su nombre a modo de saludo fingió no verme y prácticamente corrió a su casa. Algo parecido ocurría cuando iba a su casa, su mamá lo excusaba diciendo que estaba con un amigo o que estaba con su padre.

Me canse de insistir, de rogar. No soy de esa clase de chicas.

Pero si me molesta que no me dijera que no quería salir mas conmigo a la cara. Los chicos también estaban muy enfadados, sobre todo Kathe quien el día de ayer fue casi arrestada por pintar con  pintura aerosol  afuera de la casa de los padres de Bradly "Chico sin huevos"

Sacudo la cabeza, el día de hoy será un día realmente dificil. Mia me citó en su casa para tener un momento de chicas.

Al llegar a su casa froto mis manos contra mis vaqueros intentando eliminar el sudor de mis manos antes de tocar el timbre.

-Anastasia ¡Que gusto verte!

Juguemos al amor. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora