Capítulo: 22.

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Después de salir de ese lugar y dejando a tilapia solo, todo comenzaba a ser completamente distinto para ambos.

El divorcio según mi licenciado salia en una semana, tenía tan solo una semana para pensar muy bien las cosas, por lo pronto decidí tomarme una semana de vacaciones en México, ni tan de vacaciones por que tenía que trabajar desde mi correo en el asunto de la empresa.
Al llegar a México rente un departamento para no molestar a mi mamá, pasé la noche ahí.
Trabajé toda la noche en el proyecto de la empresa.
En la mañana decidí ir a visitar a mi hermano del alma Erik.

- hermanito te extrañe mucho, por favor necesito que vallas conmigo a el otro lado- dije en tono de súplica y poniendo mis ojos de gato.

- ah está bien Kasandra, ya que- respondió entre risas.

- tengo algo que contarte, ah pues tu hermana ya... - en eso me detuve un momento por que comenzó a vibrar mi celular.

- ah pues yo soy la dueña de la empresa de mi padre, no se si perdonarlo mira estoy entre la espada y la pared- comenté cabizbaja y tapando mi cara con mis manos.

- pies mira tú, compraste la empresa, no tienes por que sentirte así, pero también si quieres compartir el 50% entre ambos, sería tu decisión Kasandra- respondió cogiendo mi mano.

- tomare tú punto de vista y tu opinión hermano.

En eso volvió a sonar mi celular, era un mensaje, en eso recibí una llamada la cual no conteste, no abrí el mensaje y solo lo elimine el número y el mensaje

 Con Los Ojos Abiertos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora