To Mr. Jeon [KookV]

Capítulo 6

Dejó unos segundos el tenedor en el plato y terminó de masticar.

—¿Puedo preguntarte algo? —cuestionó al mirar a Jane, quien se encontraba trabajando en la mesa en la que estaba comiendo.

—Claro, adelante —le dijo con una de sus sonrisas agradables.

—El otro día, papá me llevó en coche a comer y a casa —dijo con cierta lentitud, pensando en sus próximas palabras—, pero esta mañana nos ha traído el chófer.

—¿Y qué ocurre? —habló con un poco de confusión.

—Le pregunté si no iba a conducir él —miró al plato— y me dijo que no solía conducir en el trabajo.

Parecía una tontería, pero aquello para él había sonado extraño. Todos los ricos conducían son coches de lujo y se pavoneaban de ello, pero su padre... Lo había dicho con cierta tensión e, incluso, con algo de reticencia. Durante el desayuno, se había quedado pensando en eso y, ahora, durante el almuerzo, en el que aún no había visto a su padre desde que desapareció, seguía dándole vueltas.

Había recordado el paseo en el coche de la última vez y ahora entendía un poco la situación de cierta incomodidad e irascibilidad.

Me dio la sensación de que no le gustaba conducir o algo así por cómo me lo dijo. —Frunció el ceño.

Ella dejó los papeles encima de la mesa con una sonrisa apenada.

—Me sorprende que alguien de tu edad se fije en eso —contestó con suavidad.

—¿Por qué? —preguntó curioso.

—Ya sabes. Los chicos de tu edad se dedican a otras cosas. —Soltó una pequeña risilla.

—A veces los envidio... —murmuró bajando la cabeza.

—¿Qué? —lo instó a repetirlo, ya que no había entendido lo que había dicho.

—Nada. —Sacudió al cabeza—. ¿Entonces es cierto? —continuó.

—Bueno, algo así. —Se cruzó de brazos.

—¿Tiene algo que ver con la muerte de mi tío? —preguntó con cautela.

Jane abrió los ojos sorprendida por la declaración del niño.

—¿Cómo lo sabes? —cuestionó un poco nerviosa.

—Mi padre me dijo lo mismo. —Se encogió de hombros—. Se puso bastante alterado cuando lo mencioné. Lo noté en la mirada.

—Es que no es algo que se haya hablado nunca. Ni siquiera yo sé qué pasó exactamente.

—Un accidente de coche —habló con simpleza.

—Eso fue lo que declararon, pero no dieron más detalles —habló con angustia. Aquel tema era un poco delicado.

Junghyung cerró los puños por debajo del mantel de color marfil. Apretó los dientes y contuvo unos segundos la respiración.

—Entonces tiene que ver con eso —afirmó mirándola de nuevo, queriendo alejar ciertos pensamientos de su mente.

—Me temo que sí —suspiró—. Como ya te dije, no sé mucho sobre el tema, pero creo que está relacionado con la muerte de su hermano. Antes no tenía esa renuencia a conducir. Aquello fue un golpe muy duro para él. Estaban muy unidos a pesar de la diferencia de edad y se querían con locura.

—¿Llegaste a conocer a mi tío? —Tembló un poco al pensar en ello.

—Sí —dijo con tristeza—. De hecho, yo iba a trabajar para él, pero antes de que asumiera el cargo por completo... —lo dejó en el aire.