Capitulo 19: Domingo cualquiera

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Desperté sintiéndome bien por primera vez en mucho tiempo, mi estomago se sentía lleno a pesar de que aún no desayunaba y a diferencia de los demás días quería ver mi teléfono con desesperación. Frotando mis ojos y metiendo mi mano bajo la almohada, saqué mi teléfono con una brillante luz parpadeando en la esquina superior. Antes de que me regalaran un teléfono siempre había visualizado el futuro con mi mensajería vacía, pero no era así, había un montón de mensajes, tal vez no todos para mi ya que estaba en muchos grupos, pero de alguna manera eso me hacía sentir un poco menos solo, me hacía sentir que tenía amigos quienes se preocupaban por mi y me enviaban mensajes.

Al leer el nombre de Kevin en la lista de conversaciones no abiertas sentí como enseguida mi corazón comenzaba a latir, aún no podía asimilar lo que había pasado ayer ¿De verdad nos gustábamos?, ¿No era una broma de mal gusto? Tan solo con traer a mi mente los recuerdos de ayer mi corazón comenzaba a latir y mis manos se sentía más livianas, y es que Kevin era fantástico y me sentía como dentro de una película donde gente genial como Kevin entra a la vida de adolescentes normales y con problemas de confianza como yo, tal vez era demasiado perfecto para ser cierto, tal vez algo saldría mal.

Una ola de pesimismo me golpeó llevándose todo lo bonito que estaba sintiendo ¿Y si era una broma?, ¿Y si Kevin no me quería?, ¿Y si solo quería divertirse? Comencé a sentirme enfermo a pesar de que sabía que Kevin no era ese tipo de persona, cuando te herían tantas veces pensaba que todos serían capaces de hacerte el mismo daño, pero quería convencerme de que este no era el caso. No... Kevin no era así, incluso se había puesto nervioso al hablar. Los recuerdos de la noche de ayer enseguida invadieron mi mente, las mejillas coloradas de Kevin, esa expresión tan linda que ponía al hablar y aquel beso tan rápido que posó sobre mis labios, los labios de Kevin eran ásperos a causa de los frenos, pero aun así se sentían tibios sobre los míos, extrañaba la sensación de cosquillas que dejaba un beso sobre tu piel.

Decidí que abriría el mensaje de Kevin al final con esa idea de que lo mejor siempre se dejaba al último. Ni siquiera había querido mirar mi celular después de que le había dicho que llegué a mi casa, a pesar de que me había mandado muchos mensajes ¿Por qué soy así?, ¿Y si piensa que lo estoy ignorando?, ¿Y si se aburre de mí?

Comencé a leer los mensajes del grupo de los chicos que hablaban de nuestra primera junta, Zack ya se había unido, Nicky lo había agregado. Me sorprendía lo rápido que podía conseguir el número telefónico de alguien, Carlos respondía mas cortante que antes y en nuestro grupo personal, para cuando mirábamos telenovelas o debíamos ponernos de acuerdo con algún trabajo, decía lo mal que le caía Zack pero que le daría una oportunidad. Sally me había mandado un par de videos y me preguntaba si quería salir hoy con ella a beber un café, le respondí que sí, mientras llegaba al chat con Kevin.

"Que bueno que llegaste bien, no puedo dejar de pensar en lo de hoy. Tenía mucho miedo, pero todo salió bien. Vincent de verdad te quiero y quiero hacer lo posible para que esto funcione. Buenas noches" puso acompañado de corazones cosa que hizo que mi estomago se sintiera extraño, mi rostro se sentía caliente.

"Son las tres de la mañana y no puedo dormir por pensar en ti... debes creer que soy muy cursi y bueno... ¿Estás durmiendo?"

"Claro que estás durmiendo... Cuando leas esto quiero que sepas que te quiero"

Nuevamente mi estomago daba un vuelco, mis manos habían comenzado a cosquillear al leer aquellos mensajes. No sabía por qué, pero aquellos recuerdos de cuando era menor aparecieron, todas esas personas que me habían hecho daño se vinieron a mi mente ¿Cuánto había deseado recibir un te quiero de ellos? No podía evitar recordar a Walter que tanto daño me había hecho ¿Cuánto había esperado leer siquiera un te quiero en sus mensajes? Ahora Kevin me mandaba un motón de te quiero y sentía que quería llorar ¿Por qué dolía sentirse querido?, ¿Por qué me daba tanto miedo?

Té de Manzanilla Donde viven las historias. Descúbrelo ahora