La vuelta a Londres fue un poco chocante. Me había acostumbrado al clima cálido de Toscana, al sol y a los olores intensos y darme de bruces de nuevo con los cielos grises y la niebla, me produjo cierta nostalgia aunque las cosas con William iban mejor que nunca y eso me llenaba el corazón de dicha.
Aún no entendía como había sido capaz de enamorarme de él de forma tan rápida. Al principio, cuando le conocí quería ahogarlo y ahora necesitaba amarlo con una necesidad imperiosa. Sus detalles, sus atenciones o el hecho de que fuese un reto conquistarlo, me habían bastado para descubrir en él al compañero deseado aunque era plenamente consciente de que vivía por Alice.
Seguiría sin poder desfilar durante tres semanas así que hasta entonces no tenía pensado hacerme a la idea de lo que sería vivir lejos de mi novio ficticio. Prefería no pensar acerca de ello. Sufrir dos veces no era algo que tuviera previsto. Mientras tanto disfrutaría de él y su compañía.
-Jamás había pensado que salir en las revistas del corazón fuese tan beneficioso para mi empresa-comentó un día al llegar a casa-.
-Vaya no sabía que te moviese tanto el dinero.
-No lo hace. Simplemente me hace gracia que por ser el supuesto novio de Eleanor Jameson, los encargos de páginas web estén lloviendo como si no hubiera un mañana.
-Me alegro por tí entonces.
-Eres toda una entusiasta en lo que a aspectos informáticos y negocios se refiere, Eleanor pero te daré un motivo por el que sentirte alegre.
-¿Ah si? ¿De qué se trata?.
Estaba haciéndome la dura pero en verdad estaba expectante por saber de qué se trataba.
-He de viajar a Irlanda mañana. Unos asuntos de mi empresa me requieren allí. He pensado que quizás te interese venir conmigo.
-No se, Will-fingí dudar-. No se si me apetece ir a una reunión de frikys amantes de los ordenadores.
-¿Me estás llamando friky?.
Se hizo el ofendido.
-Algo así. Para tí aún no tengo definición. Tonto aburrido podría ser buena pero demasiado fácil.
Se acercó a mí y me cogió en brazos (creo que era su deporte favorito) llevándome a toda prisa al sofá. Donde me tiró y comenzó a hacerme cosquillas.
-Retira tus palabras, señorita Jameson.
-No puedo-grité sin parar de reírme-. Eres un tonto aburrido.
-¿Con qué esas tenemos?.
Sus cosquillas eran ahora más rápidas y ya empezaba a llorar de risa pero en un movimiento brusco el se apoyó sin querer en mi tobillo roto.
-¡Will! Mi tobillo-grité-.
-¡Lo siento mucho!.
Me pidió disculpas e interrumpió su juego.
-¿Te he hecho daño? ¿Necesitas ir al médico?
-No, Will. Estoy bien.
Me quedé mirándolo fijamente. Su rostro era lo más bonito que había visto jamás.
-¿Sabes? Me encantan tus ojos cuando te ríes. Con el brillo parecen verdes.
El hecho de tenerlo encima de mí, mirándome a los ojos, sintiendo su piel y por no mencionar el hecho de que había cierta parte de su masculinidad que comenzaba a notar presionarme, me hicieron sentirme totalmente excitada. Nuestro deseo mutuo era fácilmente palpable y casi creí que ninguno de los dos podría resistirse en esta ocasión cuando volví a sentir el dolor en mi tobillo.
ESTÁS LEYENDO
Tan Sólo Hazme Olvidar(COMPLETA)
Romance💕💕ATENCIÓN. SE RECOMIENDA LEER ANTES "TU SARAI SEMPRE LA MÍA VITA" de lo contrario os podréis encontrar con Spoilers💕💕 William es un empresario londinense con un alma más pura que los mismos ángeles. Paciente, calmado y sonriente, ama la vida y...