PROHIBIDO

13. Fin

---¡SAMANTHA!.---esa voz la escuchaba lejos, era como si toda mi alma ya no estuviera en la tierra. Ya podía observar como una luz blanca se hacía presente. No podía dejar de doler, era mi último día.

Mi fín, había llegado.

8 horas antes

---Vamos, quiero que todos hagan ese proyecto sobre la confianza. Vale diez puntos.---anuncio el profesor mientras preparaba su maletín.---No quiero ninguna excusa, disfruten de su receso.

Las cosas entre Elliot y yo no mejoraban. Era como si todo lo que estaba a mi alcance de hacer algo bueno, se alejara un poco más. Sentía como mi corazón se aceleraba al ver a Elliot salir de clase triste. La clase había estado aburrida, era como si su estado de ánimo fuese contagioso y todos estábamos contagiados debido a eso. Y lo peor de todo, era mi culpa.

---¿Lo hacemos juntas?.---el hermoso rostro de Scar se hizo presente. El proyecto era de dos personas. Para ver la confianza que se tenían una a la otra.

---Obvio, ¿Con quién más lo haría?.---ella rió un poco y miró a la puerta.

---¿Que tendrá el profesor Elliot? Estaba muy raro hoy.---mi mirada pasó de una divertida a una triste, otra vez.

Estaba triste por Elliot y ahora por el proyecto. ¿Qué tanta confianza le tenía a Scarlett? Siendo sincera, creo que nada.

---No lo sé. ¿Vamos a receso?.---ella asintió y salimos en dirección a la cafetería.

La cafetería estaba llena de estudiantes, por suerte había una mesa vacía. Scar y yo nos sentamos allí y comenzamos a hablar de cualquier disparate que se nos ocurre cada vez que nos quedamos sin palabras.

---Estoy pensando en ir a una discoteca. Ya sabes, para entenderte y hacer el proyecto bien.---yo estalle en carcajadas. Esta chica es una completa loca.---¿Que? Necesito saber porque encuentras eso tan divertido.

---No seas ridícula. Es de la confianza.---volvi a reír.---Lo que tenemos que hacer es pasar un fin de semana juntas, para entendernos mutuamente.

---Esa idea está mucho mejor.---sonrio mostrando su perfecta dentadura.

---¡Hola!.---se unió otra voz a la conversación. Era el chico guapo de ayer, el mismo que me llamo rara.---Hola Scarlett, hola chica rara.

---¡Hola Tyler!.---respondio Scar con una sonrisa.

---Hola, supongo.---me levanté de hombros.---¿Se conocen?

---Somos primos. No te lo había presentado porque es un completo idiota, ya sabes te puede joder la vida.---ella rió y el le dio un pequeño golpe en el hombro.

---Me había volado un trimestre, he tenido algunos problemas.---respondio con una sonrisa.

---Bueno, lo de idiota lo creo.---Scar estalló en carcajadas.---¿Porque soy la chica rara? ¿Y cómo me conocías si no has estado en tres meses?.---me cruce de brazos.

---En lo que hablan, voy por un licuado de lo que me apetezca.---le guiño un ojo, y se fue.

---Todos te conocen Samantha. La increíble Samantha Brown estudiando en una Universidad para personas con pocas posiblidades.---rio por lo bajo.---Eres muy rara.

---Fue un castigo.---aclare y el asintió.

---Por eso eres rara. Tu, que lo tienes todo y simplemente te interesa ser una rebelde de mierda. ¿Sabes a cuantas personas de aquí les interesa estudiar en la universidad donde estabas? y tu simplemente lo desperdicias de esa manera.