Hide & seek

Capítulo 15

— ¿Un campamento?— preguntó Sakuma a Kidou mientras estaban almorzando los tres (Genda, Kidou y él) juntos en la azotea.

En un intento de hacer que Sakuma y Kidou se llevaran bien, Genda empezó a invitar a Kidou a almorzar con ellos. Parecía estar funcionando bien, al menos Sakuma le hablaba a Kidou sin problemas, claro siempre y cuando no se mencione el incidente del entrenamiento. Aunque tampoco hablaban gran cosa, solo lo necesario pero en opinión de Genda era un buen progreso.

— Si, un campamento de entrenamiento solo para los de mi equipo — confirmó el de rastras— Aprovecharemos los días de fiesta —

— Suena interesante, ¿a dónde van a ir?— pregunta Genda mordiendo su sándwich.

— Tu también vienes, Genda, el Rey de los Porteros estará en mi equipo del próximo año, cuando los de tercero se hayan graduado —

— Te olvidaste de responder la pregunta — le recuerda Sakuma tomando su jugo.

— Iremos a la playa —

— Suena interesante —

— Si, les avisaré a los demás. Saldremos el viernes a medio día —

[...]

Como era de esperarse todos se emocionaron al saber que se pasarían las fiestas en la playa.

La semana que esperaron fue entre lenta y muy rápida pues estaban ansioso por ir al campamento.

— Esto no puede ser posible — suspira Sakuma viendo la siempre desordenada habitación de Genda — ¡Se supone que nos vamos mañana y aún no has hecho la maleta!—

— En mi defensa lo que ves es el resultado de intentar hacer la maleta —

— No lo digas con ese orgullo — le responde Sakuma pellizcando su cachete— ¿Cómo es posible que en el campo estés muy concentrado y que tu habitación sea un desorden?—

— Un misterio de la vida —

— Debería darte una lección e irme a mi casa sin ayudarte — Genda sujeta la mano con la que Sakuma le estaba pellizcando.

— No lo harás — Sakuma lo mira frunciendo el ceño— Eres un buen amigo que me ayudará sin importar lo que pase —

— Tsk — truena su lengua.

— Además si te vas ahora te sentirás culpable y te despertarás muy temprano en la mañana para venir a ayudarme. Mejor ahorrémonos ese paso — Sakuma puso los ojos en blanco y acepto ayudarlo a organizar su maleta.

[...]

El viernes por fin llego y al medio día frente a la escuela ya estaba un camión listo para partir a la playa.

Llegaron a una gran casa de color blanco y con un gran jardín trasero. El interior no se quedaba atrás era bastante lujoso.

— Mira, está habitación tiene una gran vista — dijo Sakuma cuando empezaron a repartir las habitaciones y encontró una con una ventana que daba una vista perfecta al mar y a la playa donde podía ver a las gaviotas, garzas y el romper de las olas del mar.

— Si, es bonita — concordó Genda sonriendo mirando como la ligera brisa movía el cabello de Sakuma y mezclaba su aroma con el de la brisa salada del mar. Sakuma se giró para verlo y sonreírle para decirle algo pero Genda no prestaba atención a lo que decía al menos no completamente pues estaba perdido pensando en que sin duda ver a Sakuma así era una linda vista

— ¿Genda? ¿Sakuma?— pregunta Kidou apareciendo detrás de ellos y haciendo a Genda reaccionar  — Si ya están instalados vamos a almorzar y después a entrenar —