Capítulo 28

278 35 4
                                    

Dejaron pasar algunos días antes de decirles a sus familias sobre su relación.

Sora felicitó a su hijo y a Genda, sin duda estaba muy feliz porque el deseo de su hijo se hizo realidad. Ver a Jirou feliz le daba mil años de vida más.

Para Genda la cosa fue un poco complicada pero no se negaron a nada ya que una vez su hijo se decidía a algo no había nada que lo hiciera cambiar de opinión.

— Papá...— le llamó una vez más irrumpiendo en el despacho de noche — ¿Me odias por la decisión que tome?— una vez más el padre de Genda apago todo y lo invito a sentarse en el sillón.

— No te odio. Nunca podría odiarte — le sonrió y admiro por un momento a su hijo, ya no era un niño, era un joven decidido y fuerte, sin embargo temía un poco por su hijo pues el mundo no es nada amable con lo que es diferente— Te lo dije hace algunos años ¿no? Siempre te querré sin importar lo que elijas —

— ¿Puedo hacer que el padre de Sakuma deje de odiarlo?—

— Por desgracia eso no lo sé. Pero no te preocupes por eso ¿si? — a veces su hijo podía ser inocente y dulce.

— Pero si lo sigue odiando podría llegar a... Lastimarlo otra vez — susurra ocultando sus ojos azules en su flequillo.

— ¿Sabes? Estoy seguro que encontrarán una solución para eso. Además estoy seguro que deberías estar feliz y contento pensado en tu noviazgo con Sakuma. ¿Lo invitarás a pasear? ¿A una cita?— por toda respuesta de su ahora sonrojado hijo recibió un asentimiento.

Por desgracia no podían hacer todo lo que les gustaría, pues aunque querían salir a pasear como una pareja no lo hacían debido a los entrenamientos de los dos. Ahora que se sabía lo del Neo Japón, Sakuma se negaba a que Genda lo ayudara a entrenar ya que no quería que sufriera una recaída por hacer tanto entrenamiento.

Aunque eso no impedía que Sakuma hiciera un poco cortas sus sesiones para ir a ver a Genda entrenar y... Solo tal vez demostrarle a Seginuma que ahora no tendría oportunidad con el Rey de los Porteros. No podía evitar acercarse al final del entrenamiento y besar la mejilla de Genda. Le gustaba dejar en claro que ahora eran pareja. Y al castaño como todo gatito le gustaba dejarse mimar por el joven pingüino enfrente de sus compañeros.

Pronto sería el partido decisivo para Neo Japón uno por el cual Sakuma estaba ansioso. Si vencían a los actuales representantes de Japón podría ir junto a Genda a conocer el FFI.

Decidieron que Sakuma no fuera a ese partido pues no querían que se metiera en problemas.

Aún así Sakuma observó el partido a lo lejos. No podía creer lo mucho que el Inazuma Japón había mejorado en unos meses y tampoco podía creer que el Neo Japón pudiera hacerles frente. Por un momento pensó que aquello iba a ser posible. Que podría ir con Genda al FFI pero no fue así... El Inazuma Japón ganó por un gol.

Aquello dejó decepcionado a Sakuma pero trató de mantener buena actitud frente a Genda.

Después del partido contra Corea llamaron a Sakuma para que fuera a la Isla Lotticon a ser representante de Inazuma Japón.

Para celebrar tuvieron su primera cita oficial. Fueron al festival de un templo cercano. Sakuma había decidido vestir un elegante yukata color negro con detalles azul rey.

— Mmm t-Te ves bien — susurro Genda sin apartar la mirada de Sakuma pese a que estaba muy sonrojado.

— Gracias — sonríe y emprenden el camino al festival.

Jugaron y comieron tanto como sus bolsillos se los permitieron.

Y claro, también se besaron cada vez que podían. Para el final de la noche regresaron tomados de la mano.

Hide & seek Donde viven las historias. Descúbrelo ahora