Min Yoongi, de 29 años, se sienta a escribir los votos para su boda. La inspiración es difícil de encontrar, y una sugerencia (no tan) sutil de su mejor amigo, Kim Taehyung, abre una puerta a su pasado y se da cuenta de que nunca se cerró realmente...
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-Pero no quiero.
-Oh pobre Yoongi Hyung- dice Taehyung con sarcasmo- Su novio caliente y rico quiere llevarlo a tomar un trago en su cumpleaños y él no quiere. Sí, ahora puedo ver cuán devastador sería eso...
Yoongi frunció el ceño, su mandíbula se bloqueó mientras consideraba colgar el teléfono.
-Jesucristo- Taehyung se quejó al otro lado de la línea- ¿Si sabes que no es su primera cita?
Obviamente, él simplemente no entendió.
La reunión rápida de Jin se había convertido en una larga, y se había visto obligado a tomar tragos en un bar en el centro de Seúl para fomentar una posible relación comercial con un abogado corporativo. Se había disculpado por teléfono, y Yoongi no podía guardar rencor, pero mientras estaba sentado solo en casa, el sábado, en su cumpleaños, había empezado a sentir lástima por sí mismo.
Así que llamó a Taehyung, esperando algo de simpatía, pero claramente, llamó a la persona equivocada.
-Hyung- suspiró Taehyung, su tono mezclado con falsa comprensión- Jin es super caliente, ¿sí? Y lo estás dejando sólo con un tipo quizás atractivo.
-Bueno, duh- murmuró Yoongi.
-Y él es increíble y lo amas, ¿verdad?
-Mhm.
-Entonces ponte un jean decente, toma un taxi en la maldita ciudad y deja que tu novio te compre bebidas en tu maldito cumpleaños- escupió Taehyung.
Yoongi hizo un puchero, dejando escapar un suspiro.
-Cenaremos en la casa de mis padres.
-A las nueve y media- señaló Taehyung- ¿Ahora qué, son las seis menos cuarto? Llegarás a la ciudad a las seis y cuarto, tomarás unos tragos y dejarás que Jin te concienta y vuelven a cenar. No es una ciencia.
Yoongi sabía que tenía razón, y tal vez por eso había llamado a Taehyung en primer lugar, pero admitir la derrota era difícil.
-En serio- suspiró Taehyung- Decidiste estar completamente sólo, tonto y conformarte con una simple cena con tus padres en lugar de una fiesta legendaria, así que deja que Jin Hyung te saque, ¿de acuerdo?
-¿Está él maldiciendo?
Yoongi rodó los ojos cuando Hoseok intervino en su conversación.
-¡Dile que mueva su pálido trasero ya!
Yoongi frunció el ceño e hizo una nota mental para decirle a Hoseok cuánto se estaba convirtiendo en Taehyung.
