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Estuve todo el día pensando en ese beso "insignificante" con Alex. Rogaba no cruzármelo en el pasillo. Operé y cuando cayo la noche, busqué una cama libre para dormir aunque sea una hora. Entré a una habitación y estaba Alex acostado en la cama de abajo. Sin decir una palabra, entre y subí a la de arriba.

—Ammy, ¿Estas bien?

—Si, solo ha sido un día agotador. ¿Tu?

—Lo estoy. Siempre lo estoy.

—¿Entonces lo que paso anoche fue solo un error?

—No fue un error. Fue una... estupidez. Nos hemos dejado llevar. Pero ya paso, somos solo nosotros.

—Genial. —No sabía si la idea de olvidar el beso era algo que me agradaba o no.

—Ammy...

—¿Que sucede?

—Besas increíblemente bien. Deberías animarte con Riggs, quedara loco contigo, te lo aseguro. Además que estas increíblemente buena.

—No lo entiendes. No es hablar con chicos lo que me pone nerviosa. Es otra cosa. Mi inseguridad la siento cuando tengo sexo con otras personas.

—Pero desde que nos conocimos has tenido sexo. Mark, el fotógrafo, Arizona y tu ex novio. ¿Cual ha sido el problema?

—Mi ex. Pase por una situación horrible. La última noche que estuvimos, me humillo en la cama. Me ha obligado a hacer cosas que no quería. Y desde allí, me ha costado tener intimidad con alguien. En realidad desde ese momento que no he tenido sexo con nadie. Casi un año. —Alex se levantó de la cama rápidamente.

—¡Sabía que no era de fiar! ¡Y te lo advertí desde el primer momento! ¡¿Por qué no me lo has contado?! —Estaba furioso.

—Porque sabía que ibas a ponerte así. Ya esta lejos Alex, esto es cosa del pasado. Además tuve la oportunidad de hablarlo en terapia.

—Si no estaría en la otra parte del estado, lo estaría moliendo a golpes. —Me baje de la cama y me sequé las lagrimas sin que lo notara.

—Ya estoy bien. Tranquilízate Alex. —Lo abracé y el me correspondió.

—Te quiero tanto. Y quiero que confíes en mi. Soy tu amigo y voy a estar contigo pase lo que pase.

—Yo te quiero a ti.

—Tengo que confesarte que me ha dolido que no hayas contado. Somos mejores amigos. Tu me has visto en mis peores momentos, siempre he expresado contigo como me siento. Me gustaría que confíes en mi, siempre voy a estar aquí para ayudarte. Con cualquier cosa.

Nos acostamos los dos en la misma cama y me quede dormida entre sus brazos. Realmente no imaginaba una vida donde Alex Karev no era parte.

El busca de ambos sonó y nos despertó. Había una urgencia y con niños, hoy trabajaríamos juntos.
Nos levantamos y mientras salíamos, ate mi despeinado cabello. Cuando abrimos la puerta, nos encontramos con Cristina quien nos miró cómplice. La conocía tan bien que podría asegurar que pensaba que habíamos tenido una noche salvaje, cuando lo único que hicimos fue dormir.

—No hagas esa cara. —Le dijo Alex.

Solo AmigosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora