Cuando Siv llega a Kattegat, tiene una misión: casarse con uno de los hijos de Ragnar.
Entre estos rudos vikingos encuentra a su alma gemela y así comienza la historia.
Vikingos la puta mejor serie 👊🤜👊
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Comenzamos a bajar de los barcos ansiosos.
—Por fin.— respiré el olor a leña quemada de las chimeneas de Kattegat y me sentí en casa.
Me giré tapando los rayos de sol con la mano, buscando a Ivar. Le vi justo en el momento que salía del barco, sin embargo, al verme él a mí su cara era de horror puro.
—¡¡¡No!!!— chilló de pronto mirando hacia mis espaldas.
Saqué el puñal de mi cinturón casi como un acto reflejo y di la vuelta sobre mí misma, clavando el puñal en el estómago de un tipo. Al subir la mirada comprendí el miedo de Ivar, tenía un hacha a la altura de mi cara. De hecho, unos segundos después, me di cuenta de que había llegado a cortarme con ella y de que la sangre corría como un río por desde mi frente saltando mi ojo izquierdo y continuando por la mejilla.
—Mierda...— murmuré al notar cómo el mareo desembocaba en una caída al suelo.
En ese momento dejé de ver el Sol, el cielo se llenó de rostros preocupados. No paraba de oír «Siv», «¿Estás bien?» ,«Princesa», «Svarti», etc.
—¡Es mi mujer!— gruñó Ivar haciéndose hueco entre la gente. Dejó las muletas y se arrodilló junto a mí.— Tranquila, te pondrás bien.
—Debo morir en batalla... así no.— suspiré con dificultad.—Reza a Eir, Ivar. Pero no sacrifiques nada, planta árboles para ella.— murmuré en su oído, para después cerrar los ojos.
