Mi sol a media noche. (Edward y oc)

¡Maldita sea!

-Hola, chicos -dijo sonriéndome- Supuse que querrías tomarte un respiro de cocinar y fregar platos el día de tu cumpleaños. ¿Hay hambre?

-Está bien. Gracias, papá- dije.

Papá no hizo ningún comentario sobre la aparente falta de apetito de Edward. Estaba acostumbrado a que no cenara con nosotros.

-¿Le importaría si me llevo a Beka esta tarde? -preguntó Edward cuando Charlie, Bella y yo terminamos la pizza.

-Eso es estupendo, los Mariner juegan con los Fox esta noche, así que seguramente seré una mala compañía- dijo papá.

-Yo he quedado con Angela para terminar un trabajo, así que tampoco estaré en casa- dijo Bella.

- Toma- dijo papá sacando la cámara que me había comprado y me la lanzó -Si han organizado algo divertido esta noche en casa de los Cullen, Beka, toma algunas fotos así le podrás mandar algunas a René. - dijo.

-Buena idea, Charlie- dijo Edward mientras tomaba la cámara de mis manos y la encendía- ¿podría tomaros una foto a los tres?

-Genial- dije poniéndome en pie a un lado de papá.

-No me gustan las fotos- murmuro Bells.

-Hazlo por mi ¿sí? - pregunté poniéndole un puchero que la hizo reír.

-Está bien, está bien, pero quita esos ojillos- dijo Bells poniéndose al lado de papa.

-Quiero una sonrisa en esa foto papá- le advertí.

-Lo intentaré- dijo divertido.

-¿Listos?- preguntó Edward y sonreí- uno , dos...

Cuando iba a disparar le hice cosquillas a papá haciendo que su maravillosa sonrisa apareciese en su rostro.

-Ha salido muy bien- dijo Edward tras revisar la foto.

Me acerqué a verla y realmente era perfecta.

-Es genial, gracias- dije sonriéndole y dándole un beso en la mejilla.

Apunté a Edward con la cámara y le tomé una foto desprevenido, me miró divertido y me reí.

-Creo que debemos irnos ya- dije.

-Estupendo. Oye, saluda a Alice de mi parte. Lleva tiempo sin pasarse por aquí- dijo papá.

-Sólo han pasado tres días, papá -le recordé divertida.

Papá estaba loco por Alice. Se encariñó con ella la última primavera, cuando me estuvo ayudando en mi difícil convalecencia; Charlie siempre le estaría agradecido por salvarle del horror de ayudar a ducharse a una hija ya casi adulta cuando Bella no podía hacerlo.

-Se lo diré- dije- ups, tengo que cambiarme, dame 2 minutos Edward.

-Claro- dijo con una pequeña sonrisa.

Me apresuré a cambiarme, puse unos pantalones tejanos, un jersey fino y unos playeros antes de bajar y reunirme de nuevo con todos.

-Que os divirtáis esta noche, chicos- dijo papá despidiéndose.

-Beka, ¿puedo tomar prestado tu versión de Romeo y Julieta para preparar el trabajo con Angela? - me preguntó Bells cuando estábamos por irnos.

-Claro, está sobre mi mesita- dije.

-Gracias, pasadlo bien- dijo antes de subir a mi habitación.

Nos dirigimos a mi moto y tras subirme me giré para mirar a Edward.