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Entro a mi casa azotando la puerta y lanzando todas las maldiciones que me sé. Derek camina detrás poniendo su mano contra su cabeza pue esta aun sostiene su arma.

—¿Estás segura?, ¿Estas completamente segura?

—¡Claro que estoy segura! —camino hacia la sala en donde encuentro a mi hermano con Aleena sentada en sus piernas mientras el la abraza descansando su mano en su cadera. Adam revisa algunos papeles, Drakekov fuma un cigarrillo y sostiene una copa de whisky en su otra mano, Lucius mira el mural que he ido armando y no tengo idea de donde esté Dylan, Marissa y Lay.

—¿Qué diablos pasó? —pregunta serio mi hermano al verme tan molesta.

—¡Esa maldita hija de la verga que la expulso fue quien me traiciono!

Aleena abre mucho los ojos ante mi nada sutil vocabulario. Todos dejan de hacer lo que hacían y me miran, yo me acerco a paso firme hacia Drake y le arrebato el cigarrillo que sostiene entre sus dedos y que se quedo a medio camino hacia su boca cuando me escucho soltar esa blasfemia.

Lo llevo a mis labios y le doy una profunda calada, casi enseguida expulso el humo y le doy una más.

—Gracias a dios papá no esta en la casa. Odia que hables de esa forma. —me dice Edward acariciando suavemente la cadera-glúteo de su novia.

—En este momento eso es lo que menos me importa— respondo y doy otra calada.

—Exactamente ¿qué fue lo que pasó Sam? — pregunta Drake.

—Que una maldita hija de puta me traiciono y todo este tiempo le ha estado pasando información a Jackson sobre nuestras casas de seguridad y cosas por el estilo. — escupo con odio dándole otra calada al cigarrillo que ya no pienso devolverle a Drakekov.

—¿Triz? —pregunta Adam sin poder creerlo.

Lo miro y asiento expulsando el humo del cigarrillo y tirando la ceniza en el cenicero cerca de mí.

—¿Qué? ¿Beatriz traidora? — continua Edward —No lo sé Sam, no parece tan lista como para hacer algo así.

—Pues esa hija de puta nos engaño a todos. —habla Derek— Huyo del departamento en donde estaba y adivina con quien fue con quien escapo. —dice mirando a mi hermano.

—Jackson. —responde Drake.

—Exacto. -le dice Derek dejando su arma en el escritorio y acercándose al bar para servirse un trago.

—Mierda. —comenta Lucius— ¡Con un carajo! ¡¿Cómo pudiste ser tan descuidada para no darte cuenta de que tenías a un soplón entre tu gente Samantha?! ¡¿Cómo putas no te diste cuenta?! —me grita.

—¡Tu no lo entiendes Lucius, no la conociste! —me defiende Adam.

—Lucius, —interviene mi hermano más tranquilo— la chica era la persona más estúpida que podrías haber conocido. Jamás hubiéramos esperado algo así de ella. De cualquiera menos de ella.

—Exactamente por eso fue por lo que lo hizo. —interviene Derek— Lo hubiéramos esperado de cualquiera menos de ella.

—¡Son unos pendejos! —grita Lucius de nuevo y veo a Edward rodar los ojos.

—Lucius. —pronuncia Drake de forma autoritaria, llamando a su hermano para que mantenga la calma.

—No, No lo entiendes cabrón. —habla Derek sonando ligeramente molesto— Sam ni siquiera la dejaba cocinar porque siempre que lo hacía incendiaba la casa. Era la persona más estúpida que podías llegara conocer.

Carpe Diem III [Saga CARPE DIEM 3] *SIN EDITAR*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora