Carpe Diem III [Saga CARPE DIEM 3] *SIN EDITAR*

22.

Derek.

Conduzco hasta el lugar en donde Amber me a citado. Entro al estacionamiento de la plaza y aparco mi camioneta. Bajo del auto y sin mas me dirijo al café donde tengo que verla.

Cuando me encuentro cerca del sitio alcanzo a distinguir su rubia cabellera dándome la espalda y su bolso acomodado en el respaldo de la silla que ocupa, continuo mi camino y cuando paso junto a ella coloco mi mano sobre su hombro y le doy un pequeño apretón antes de sentarme en la silla vacía frente a ella.

—Hola —me saluda feliz y regalándome una gran sonrisa.

—Hola —correspondo el saludo de la misma manera y casi enseguida una mesera se acerca para saber si quiero beber algo. Pido un café americano y después miro a Amber— ¿a qué se debe todo esto? ¿y por qué nos reunimos aquí y no en el sitio de siempre?

Amber me sonríe y ladea su cabeza un poco apenada, luego responde:

—Es que voy a ver a otra persona después, y esta reunión será mas corta que las anteriores.

—Mmm, ya veo —la mesera regresa con mi café y lo deposita en la mesa, respondo con un simple gracias y miro de nuevo a Amber— ¿Y tu padre?

—No ha venido hoy. Como te he dicho tengo otra cita después, y no quería incomodarme, además, esto va a ser rápido —se gira y toma su bolso buscando algo—, solo quería devolverte el libro que me prestaste.

Lo miro confundido por el hecho de que yo no le he prestado ningún libro, les preste dinero, pero no libros.

Debo un sorbo de mi café y mi confusión aumenta cuando saca un enorme ejemplar de las mil y una noches, en lo que parece ser una edición vieja, lo coloca en la mesa y después lo desliza hacia mí.

Amber nota mi confusión, así que me sonríe y pacientemente me dice:

—Ábrelo.

Frunzo el ceño y tomo el libro. A simple vista parece un libro común y corriente, y real. Pero cuando lo tomo en mis manos me doy cuenta de que pesa mas de lo que debería, incluso para su grosor.

Miro de nuevo a Amber y con cuidado abro el libro que me a entregado, solo así me doy cuenta de que en donde debería estar la parte central de las "hojas" hay un gran hueco rectangular. Es un libro falso.

—Es solo una parte de lo que nos has prestado, pero es lo que justo ahora podemos devolverte —me explica Amber.

Dentro del libro falso hay un sobre manila de esos en los que guardas dinero, el cual luce mas que voluminoso, entonces comprendo todo.

—¿Estás segura? No es necesario que me lo devuelvan justo ahora, no lo necesito.

—¿Estás loco? Claro que podemos devolverlo. Nop es toda la cantidad que nos prestaste, pero es una parte.

—De verdad Amber, dile a tu padre que no se preocupe por devolverlo tan pronto, yo no tengo ninguna prisa ni se los estoy cobrando tampoco.

Ella sonríe gentilmente.

—Tranquilo, papá ya ha revisado sus finanzas y él mismo me ha pedido que viniera a traértelo. De verdad Derek, muchas gracias por ayudarnos, eres un buen amigo. Mas aun tomando en cuenta lo que te hice y lo que mi prima Lana le hizo a tu novia. Estoy muy apenada.