Paralizada en mi lugar observo a Damián, quien rápidamente saca sus manos de debajo de mi blusa y se aleja, girando hacia el intruso.
Una serie de maldiciones se escuchan al fondo.
Es Kenndrew.
Nerviosa me bajo del lavabo y me arreglo la ropa.
-No vuelvas a hacer eso, joder – le dice Damián con los puños apretados.
Kenndrew me mira un momento con el ceño fruncido antes de ir hacia Damián.
"¿De verdad estabas a punto de perder la virginidad en el baño de un club?" me reprocha mi consciencia, pues al parecer sí.
Abochornada miro fijamente mis zapatos. La neblina en mi cabeza ha desaparecido y la razón empieza a hacer acto de presencia.
-Créeme que lo menos que quería hacer era ver como...
-Cuida tus palabras – le interrumpe Damián.
Ante eso levanto la mirada; unos fríos ojos color avellana me traspasan.
-Tenemos problemas – contesta Kenndrew de forma sombría, sin quitar su mirada de la mía –.Y con ella tenemos el doble de problemas – escalofríos recorren mi cuerpo.
De pronto el ambiente se torna pesado. Inquieta limpio mis húmedas palmas en mis Jeans.
-¿Y por qué yo habría de ser un problema? – me atrevo a preguntar con voz algo débil.
-Mierda – dice Damián mientras se acerca a Kenndrew.
Ninguno me contesta, sino por el contrario, ambos se alejan un poco de mí y empiezan a hablar en voz baja y de manera rápida para que, segura estoy, yo no escuche nada.
Después de unos segundos Kenndrew se aleja y Damián viene a mí. Me observa con frialdad.
Al parecer los besos se han acabado por ahora, pienso.
-Bien, escúchame y no preguntes.
Lo observo confundida. –Pero...
Me interrumpe: -Yo saldré primero con Kenndrew de aquí, así que en cuanto nosotros crucemos la puerta de este baño esperarás un minuto como mínimo y saldrás tú. Te dirigirás directamente hacia la salida del local y mientras lo hagas no hables ni mires a nadie, mantén la cabeza abajo en todo momento – se detiene y me observa con escrutinio. –Deja que el cabello te caiga en la cara, no lo coloques detrás de tu oreja ¿entendiste?
Extrañada asiento y dejo caer los mechones a mis lados. –No entiendo ¿Qué está pasando?
En vez de contestar me ignora y se gira hacia Kenndrew quien asiente.
-Siempre y cuando no la vean y se vaya rápido todo irá bien.
Asustada tomo del brazo a Damián. –Me estas espantando ¿Qué está pasando?
Quita mi mano de su brazo y me observa con ira, como si me quisiera desaparecer en ese mismo momento.
Retrocedo un paso.
-Sal lo más pronto posible de aquí, en la salida te están esperando Logan y Natalia para llevarte a casa.
Miedo, no, profundo terror invade mis sentidos. Algo malo está pasando y claro está que Damián no piensa compartir información, causando que mis entrañas se empiecen a torcer.
Sin decir nada más ambos salen. Yo me quedo, perturbada ante lo que acaba de pasar.
Indecisa no espero el minuto y salgo, observando mi alrededor; no hay nadie en el reservado.
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EL SECRETO DE LA MAFIA (1)
RomanceCreí saberlo todo pero él me enseñó que no era así. Pues a veces las traiciones vienen de quien menos te lo esperas, y las mentiras pueden ser tu pan de cada día. Creí ingenuamente que tendría un amor sincero y de película. Pero él me enseñó que no...