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Aquel recinto sagrado ha sido inundado por los rumores de todos los estudiantes. La mirada de aquel joven irrespetuoso, reta a la madre superiora mientras camina lentamente hacia ella.
Se detiene en la tercera fila, coloca su pie izquierdo sobre la banca y con la mano derecha hace a un lado sus cabellos castaños que caen seductoramente sobre su rostro y por fin su voz se hace escuchar.
-Buenos rezos a todos... madre superiora qué le ocurre... está muy pálida ese color no le favorece en lo más mínimo... creí que ya no habría nadie en este lugar... o será que, ¿esperan conseguir más votos a favor y entrar al cielo cuando mueran?
-QUE BLASFEMIA... COMO TE ATREVES A DECIR SEMEJANTE BARBARIDAD... TERRUCE GRANDCHESTER TE ORDENO...
La temblorosa y enfadada voz de la religiosa fue interrumpida por la voz de aquel joven.
-Lo se madre superiora, debo retirarme a mi habitación y seguramente querrá que me presente en su despacho más tarde, le doy mi palabra de inglés que le daré el gusto de verme nuevamente... quise venir a dormir un poco, solo que hoy se extendió más de lo acostumbrado... tendré que esperar afuera a que terminen.
El joven dio la vuelta y a paso lento se dirigió a la salida. Las jovencitas que le miraban con emoción, tuvieron que bajar sus miradas sonrojadas, solo Candy seguía observándolo. El inglés se detuvo al lado de la pecosa por solo unos segundos, su exquisita mirada azul profundo se incrustó en la mirada de Candy, ella reaccionó cerrando sus ojos y el joven termino por salir.
La hermana Grey, aclaro su garganta y dijo.
-Jóvenes... la misa de hoy se extenderá una hora más.
Finalmente, el sermón terminaba, los alumnos seguían comentando el suceso.
-Patty... ¿ese chico es alumno de este colegio?
-Así es Candy... es Terruce Grandchester hijo del honorable Duque de Grandchester.
-¿¡Es hijo de un duque!? – preguntó asombrada Candy.
-Si... es por eso que abusa de la bondad de la Hermana Gray... Terry acostumbra a hacer su voluntad, ya que su padre hace considerables aportaciones al colegio.
-Ya veo.
-Veo que tú también te has interesado en él.
-¿Cómo dices?
-Todas las alumnas de este colegio sueñan con ser la prometida de Terruce Grandchester, además de ser un buen partido, es un chico buen mozo, y parece que a ti también te gusta.
-Claro que no Patty... simplemente me asombro su manera de presentarse en la capilla, eso es todo. Como puede interesarme un chico como él.
-Ojalá que así sea Candy... es un chico muy extraño, no habla con nadie, no tiene amigos, pocas veces asiste a clases, la mayoría del tiempo la pasa fuera del colegio.
