One❤

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Ailén.

No narrare mi triste vida porque me no me gusta recordar lo patética que es.

Solo diré que tengo 20 años y que hoy comienzo mis aburridas e inútiles clases de baile ya que mi ridícula madre me obliga a cumplir sus sueños frustrados

Si, como ven no me cae bien mi madre ni ningún miembro de mi asquerosa familia, yo solo quería convertirme en una Chef muy conocida pero ya que mi madre quiere que sea una "bailarina"

No se como a alguien le puede gustar andar dando saltos y girando por todos lados, eso es como mucha pereza

Cuando estaba al frente de la academia de baile "Love myself". Aparte no pudieron ponerle otro mejor nombre, no se uno menos cursi

Di un gran suspiro y entré a la bendita academia, abrí de golpe la puerta y todos me quedaron viendo

Maldita sea porque hice tanto ruido

Traté de ignorar todas las miradas que estaban sobre mi y fui al escritorio de la que supongo que es la maestra.

—Buenos días señorita...—hizo una pausa esperando que me presentara.

—Soy Ailén—dije en tono serio.

—Muy bien Ailén, sientate junto a tus compañeros que daremos inicio

Sé que dijo que me sentara junto a mis compañeros pero no me gusta la gente así que mejor me siento en el rincón

La maestra empezó hablar sobre las reglas y bla bla bla... Luego dijo que empezáramos con calentamiento y ahí viene mi problema, no es que sea mala bailando si no que no me gusta ejercitarme, es como que muy cansado

Me quedé quieta mientras veía a todos como se estiraban como goma de mascar pero entre todos hubo un chico que me llamó mucho la atención.

Era un poco bajo, cabello negro y muy guapo... Esperen, ¿un chico me acaba de parecer guapo? Ja, eso jamás había pasado, debo estar loca

Volví mi vista a mi lugar y en eso vi a la maestra parada junto a mi, solo le sonreí hipócritamente

—¿Necesitas ayuda? — dijo poniendo sus manos en su cintura.

—Si la necesitara se lo hubiera pedido— respondí seria haciendo que todos voltearan a verme.

—Solo estaba ofreciéndote mi ayuda como tu maestra

—Bueno gracias, si la necesito yo la llamo

—Bueno—dijo marchándose a donde estaban los otros.

Empecé con la estúpida rutina de calentamiento para que la maestra pesada no siguiera molestando, seguro mañana no podre ni moverme de la cama

Cuando pasaron 10 minutos de calentamiento la maestra empezó hablar de nuevo

—Como ya saben al final de cada dos meses vamos a las competencias internacionales

Enserio que cada dos meses tengo que ir a ver gente estúpida compitiendo entre ellos mismos, ay no que aburrido.

—Así que hay que irse preparando desde ya. Hoy recibimos nuevos alumnos, ya conocieron a la señorita Ailén

Todos me vieron como que no me hubieran visto minutos antes, ridículos

Y el otro que se integró a nuestro grupo fue el joven Park Jimin

Así que el chico que me pareció guapo se llamaba Park Jimin. Ja, al parecer no fui a la única que le pareció guapo ya que todas están que babean por él. ¿Y porque no borra su estúpida sonrisa de su rostro? Desde que lo presentaron no ha dejado de sonreír, se le congelara la dentadura

—Lo que haremos hoy es hacer una dinámica para que todos empecemos a entrar en confianza. Así que todos hagan un círculo

Ahora que se le habrá ocurrido a esta brillante maestra

—Ya que todos estamos reunidos cada quien me dirá algo que le guste de ustedes mismos. A ver, comencemos por los nuevos

Si claro ahora empiecen por mi, que ridiculez es esta, yo no amo nada de mi. Yo solo me encargo de mantener con vida este cuerpo ¿Por que amaría algo que no me pertenece? Si, porque algún día cuando muramos entregaremos este cuerpo y solo quedara nuestra alma así que no veo porque debo amarlo

—A ver escuchemos al joven Park

Bueno yo amo mis ojos—dijo sonriendo, pero cuando lo hizo sus ojos desaparecieron, eso me causo risa pero solo me reí internamente.

—Tus ojos son muy lindos— dijo una de la chica junto a mi.

—Gracias—respondió él apenado.

Ahora tu Ailén

—¿Yo? Ah si, yo no amo nada de mi—dije sin más.

—¿Y por que? — preguntó viéndome al igual que todos.

—Primero que todo dejen de verme así y segundo dije que no amo nada de mi y eso es todo—todos me veían sorprendidos.

Ok, esta bien Ailén

La maestra continuó preguntándole a los demás y todos respondían que amaban su sonrisa, sus ojos, su piel, su color etc etc

Como que a mi me importa que amen ellos, solo estoy aquí esperando que el timbre de salida suene para poder ir a comer algo

Cuando ya todos habían terminado de decir sus cursilerías el timbre de hora de almuerzo sonó, todos salieron corriendo afuera

Yo me quedé un momento esperando que todos salieran para no tener que chocar con ellos en la salida

Cuando ya me iba a ir la maestra me detuvo

—¿Que pasa?—pregunté seria como siempre. No era de andar sonriendo con todo mundo.

—¿Por que te comportas así?

—¿Así como? Yo soy así, no le veo lo malo. Y adiós que tengo hambre

Que se cree ella para decirme como debo comportarme, vine aquí para que me enseñara no para que se metiera en mi vida

Cuando llegué a la cafetería todos estaban reunidos en sus mesas, hasta el tal Park Jimin ya tenía muchos amigos y eso que es nuevo como yo

Pero entiendo, tampoco es que quiero amigos, todos son una molestia mejor me la paso estando sola así nadie me molesta

Tomé la bandeja con mi comida y caminé hasta la última mesa del lugar para sentarme a comer, todos me veían como un bicho raro, pero a mi solo me divertía verlos porque la verdad no me afecta en nada que me vean así

𝗘𝘆𝗲 𝘀𝗺𝗶𝗹𝗲 ◡̈ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora