𝗘𝘆𝗲 𝘀𝗺𝗶𝗹𝗲 ◡̈

Thirty One ❤

—Ailén.

Desperté con mi cuerpo un poco a dolorido, cuando abrí mis ojos pude reconocer esa habitación aunque sola haya estado aquí una vez

Me levanté exaltada y me alteré mas al ver a Jimin acostado junto a mi, este estaba dormido, sin darme cuenta me encontraba observándolo, él tenia sus mejillas muy rojas y sus labios casi igual. Se miraba tan tierno así... Diablos que estoy diciendo

¿Y que hago aquí? ¿Como me encontró Jimin? Agh mejor hubiera dejado que muriera del frío

Me levanté de la cama en silencio para no despertarlo, tomé mis zapatos y mi maleta. Caminé en silencio hasta la puerta tratando de hacer el menor ruido posible

Cuando me encontraba girando la perilla de la puerta, sentí como Jimin me quitaba loa zapatos de la mano y me cargaba en su hombre

—¡Jimin bájame!— grité golpeando su espalda pero él solo se detuvo junto a la cama.

—Esta bien te bajaré— accedió pero me lanzó sobre la cama quedando sobre mi.

Maldita sea tenía a Jimin a unos cuantos centímetros de mi rostro y una sensación extraña recorrió todo mi cuerpo y mi corazón latía como que se saldría de mi pecho.

—No te iras de aquí—habló con voz baja, mantenía su vista fija en mi y eso me ponía mas nerviosa.

—Tú no me dices que hacer— intenté levantarme pero solo conseguí que él me tomara de ambas muñecas levantándolas a la altura de mi cabeza.

—A la mierda mi estúpida promesa, no puedo estar lejos de ti ¿Me entiendes?—habló serio sin quitar su intimidante mirada de mi.

—¡No, no te entiendo!— grité fuerte —¿Porque alguien como tú se fijaría en mi? ¿Porque te empeñas en estar cerca de mi si ni siquiera soy bonita como toda esas chicas que te persiguen? ¿Porque alguien me querría? ¿Porque tu lo harías?— grité tratando de contener mis lágrimas pero me fui imposible, no quería que él me viera así pero no podía controlarlo.

Él solo me vio serio y se fue acercando lentamente a mi hasta que nuestros labios estaban unidos, empezó a besarme lentamente. Sus suaves y carnosos labios devoraban los míos, haciéndome disfrutar esto. Aunque mi mente dijera que me alejara mi cuerpo no reaccionaba y quería seguir besando a Jimin

Él soltó mis muñecas y ahora las apoyaba a mis costados para no echarme todo su peso encima. Lleve mis manos a su cuello y jugaba con su cabello, en estos momentos era como si mi cuerpo se moviera por voluntad propia

Jimin detuvo sus besos tirando de mi labio inferior y no voy a negar que me gusto. Él sonrió ampliamente y ahí estaba su hermosa Eye Smile

—¿Sabes porque me gustas? — preguntó —Porque en ti vi algo que jamas había visto en ninguna otra chica, tú eras tú, no fingias ser alguien que no eras solo para atraerme, tu carácter fuerte y tus ganas de asesinarme me encantaban, me encantaba verte enojada y sin querer te metiste en mi corazón. Simplemente un día ya no pude alejarme, siempre que no te veía me hacías mucha falta y me preguntaba que ¿que estabas haciendo? Y ¿sabes? No me quiero alejar de ti, por favor no me pidas que me aleje— su voz se quebró y se acostó sobre mi pecho abrazandome fuerte.

Yo tenia un nudo en la garganta, no podía hablar. Sus palabras me habían dejado en shock, jamás alguien me había dicho algo así y puedo decir con seguridad que pude notar sinceridad en sus palabras pero eso no quitaba mi inseguridad ¿que tal que él después se arrepiente de estar conmigo? ¿Que tal si después descubre que no era amor? ¿Y si se va y me deja sola?

—Jamás te dejaré sola— susurró en mi oído como si leyera mis pensamientos.

—Jimin— hablé entre cortado, estaba muy nerviosa y miles de cosas pasaban por mi mente.

—Ailén— habló alzando su vista para verme— Esto que siento por ti, créeme que jamás lo sentí por nadie.

—Jimin, yo tengo miedo— dije entre lágrimas cubriendo mi cara con mis manos.

—No tengas miedo—apartó mis manos de mi cara y dio un beso en mi mejilla—Te quiero y eso no va cambiar.

—Promételo — lo vi fijo y él solo sonrió.

—Es una promesa— alzó su mano.

Jimin se acostó junto a mi y me rodeó con sus brazos pegandome a su cuerpo. Yo no me moví de ahí, en su brazos me sentía muy bien y aunque el sentimiento de miedo aún estaba tomaría riesgos y me atrevería a intentarlo y si algo pasa tendré que soportarlo

Jimin estaba acostado con sus ojos cerrados, sin quitar sus manos de mi cintura, me daba tanta ternura verlo así parecía un tierno bebé

—Duerme un poco, necesitas descansar— habló con su voz adormecida.

—Esta bien— susurré cerrando mis ojos.

Me acerqué mas a él poniendo mi cabeza sobre su brazo y rodee su cintura con mis manos y él hizo lo mismo, ambos nos quedamos abrazados mientras descansabamos

Aún no podía creer como las cosas habían cambiado, ahora me encontraba con el Eye Smile en su cama acostada junto a él. El destino juega sucio