Forty Seven ❤

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-Ailén-

Cuando terminamos de comer Jimin me indicó que salieramos. No sabía a donde íbamos pero el maneja en su auto con una enorme sonrisa

—Si sigues sonriendo así nos vamos a estrellar —me burle. Él solo se puso serio unos minutos y después volvió a poner su enorme sonrisa —

—Ailén—me vio unos segundos—Iremos a la luna

—¿Que? ¿De qué hablas Jimin?—reí —

—Si. Bueno no precisamente iremos a luna pero si iremos a verla

—Ya entendí. Esto es por lo de que aquella vez te dije que iba a la luna y no te llevaría —reí recordando esos momentos en los que yo trataba de alejarlo —

—Exacto—rió —Ahora iremos los dos a ver la luna

—Cursi—dije acariciando su barbilla —Pero me encanta la idea

—Eso te hace cursi también —me guiño un ojo —

Jimin siguió manejando mientras yo veía por la ventana. No podía dejar de recordar todo lo que habíamos pasado para ahora poder estar aqui; juntos y felices

Después de la tormenta viene la calma. Esa frase es la que mejor me queda, después de años de sufrimiento junto con mi familia pensé que jamás encontraría a alguien que me amara sinceramente pero en eso apareció Jimin iluminando mi vida y dándole más sentido

Quien diría que ese chico con la Eye Smile más hermosa que jamás había visto iba a estar conmigo hoy rumbo a ver la luna

—Llegamos—anunció Jimin rodeando el auto para ayudarme a bajar —

—Yo puedo—reí cerrando la puerta del auto —

—Déjame ser caballeroso con mi novia —remarcó la última palabra —

—Esta bien—di un beso en su mejilla y camine un poco —

Estaba tan concentrada en Jimin que no me había dado cuenta del hermoso lugar en el que estábamos

Se veía toda la ciudad iluminada y a como él había dicho la luna se veía muy bien. Estaba muy brillante y las estrellas a su alrededor la hacían ver aun más hermosa

La brisa fresca golpeaba suavemente mi rostro, la paz que se sentía aquí era increíble

—¿Te gusta?—pregunto tomándome de la cintura. Apoyo su cabeza en mi hombro—

—Me encanta—me gire para quedar frente a él —Pero me encantas más tú —Tomé sus mejillas entre mis manos y junte nuestros labios —

Amaba besarla. No se en que momento paso pero ya me había hecho adicta a sus labios, esos carnosos y suaves labios

—Ven—Dijo tomándome de la mano. Me arrastró hasta una pequeña manta que estaba en el suelo y ambos nos sentamos —

—¿Sabes? —hable llamando su atención—Nunca pensé que algo así me fuera a pasar a mi —reí bajo —Aún no lo puedo creer, me parece como si fuera un sueño del cual en cuanto suene mi alarma despertare y estaré sola como siempre lo he estado

—No digas eso—Se acercó más a mi y paso su brazo sobre mi hombro pegandome más a su cuerpo—Nunca más volverás a estar sola. Siempre estaré contigo

—Te amo—susurre abrazandolo—

—Te amo mucho más

Nos quedamos varios minutos viendo la luna y hablando de muchas cosas, mejor dicho de la vida de Jimin ya que yo no quería hablar de la mía

—Ailén—dijo Jimin poniéndose de pie. Me extendió su mano para que la tomara—

—¿Qué pasa?—pregunte riendo—

—Aún tengo otra sorpresa para ti

—¿Que? Ya he recibido muchas emociones por hoy

—Esta te gustará más que todas—me guiño un ojo y me jalo hacia el auto —

Volvimos a subir al dichoso auto y Jimin se puso en marcha. No estábamos regresando a la ciudad así que descarte la idea de que fuéramos a casa

—¿Qué planeas Park?—lo vi alzando mi ceja—

—Hacerte feliz—sonrió malvadamente. Y en ese momento entendí sus intenciones —

—Eres un pervertido —reí dándole un pequeño golpe—

—Necesitamos pasarla bien—rió el descarado sin nada de vergüenza —

—Jimin, basta—regañe apartando mi vista de él ya que seguro estaba muy roja—

—Tranquila mi amor, tengo todo bajo control —sonrió deteniendo el auto. Me sorprendí al ver por la ventana que era el mismo lugar donde habíamos estado la última vez —Vamos—dijo abriendo la puerta del copiloto. Cuando salí me cargo en sus brazos —

—Jimin ¡¿Qué haces?!—grite entrelazando mis brazos en su cuello —

—Cargo a mi princesa —dio un beso en mi frente —

—Como que hoy estás muy romántico ¡eh!

—Siempre lo soy

Jimin abrió la puerta de la casa de un empujón y en ese momento la música que se escuchaba invadio mis oídos, era esa canción que él siempre me cantaba. Yo ya amaba esa canción

Con forme íbamos llegando a la habitación la música se escuchaba más fuerte. Cuando Jimin abrió la puerta de la habitación me quedé sorprendida, todo el lugar estaba lleno de flores y velas. La cama estaba llena de pétalos y había una botella de champán en la mesa junto a la cama

—¿Enserio tú hiciste todo esto?—pregunte recorriendo con mi mirada toda la habitación —

—Claro que si mi amor—dijo tomando la botella de champán —No todos los días la chica de mi vida acepta ser mi novia —sonrió sirviendo la champán en las compas—

—Eres un cursi increíble—reí tomando la copa —

—Y tú eres la mujer de mi vida ¿Ya te lo dije?—me vio pensativo mientras me sujetaba por la cintura —

—Todo el día—respondí riendo —Pero puedes seguir diciéndome

—Jamás me cansaré, mujer de mi vida —rió entre mis labios —Así como jamás me cansaré de amarte

—Te.. A...Mo—dije dando besos por toda su cara—

Y en ese momento Jimin capturó mis labios, mordió mi labio inferior para abrirse paso a mi boca e introducir su lengua. Era tan exquisito sentir su lengua moverse por toda mi boca

𝗘𝘆𝗲 𝘀𝗺𝗶𝗹𝗲 ◡̈ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora