Despierto y siento que tengo los ojos algo hinchados aún.
Me encuentro en un viejo motel que hay en la ruta.
Anoche, después de haber dejado la nota para Adam en casa, tomé el coche y comencé a conducir sin rumbo alguno hasta que termine pidiendo un cuarto en éste lugar.
Tomo mi celular, que se encuentra bajo mi almohada, tal como esperaba, tengo varias notificaciones. Siete, para ser exactos.
Tres llamadas perdidas de Adam,
Dos WhatsApp de Claudia y dos notificaciones de Víctor, una llamada perdida y un WhatsApp.
Decido ignorarlos por un rato. Al menos hasta que acomode mis ideas.
Después de desayunar y tomarme un largo momento para descansar, decido abrir los WhatsApp de Claudia.
•So ¿Donde estás?
•Sólo dime que estás bien. Me tienes preocupada.
Luego el mensaje de Víctor.
•Tu y yo nos debemos una conversación. Llámame a la hora que quieras, iré donde estés.
Luego, Decido responder uno a uno. Primero llamo a Adam.
Después de unos segundos, responde.
-Hola. ¿Dónde estás?-
-Eso no importa. ¿Haz leído la nota?-
-Sí, y para ser sincero, no veía la hora de que surgiera el tema. En cuanto quieras, regresa a casa y hablaremos.-
-Al menos estás siendo sincero ahora.-
-Sophie. Quiero que terminemos en buenos términos.-
-Supongo que es lo mejor.-
-Es la primera vez en mucho tiempo en la que estamos realmente de acuerdo...-
-Supongo, no vemos luego.-
-Ok. Nos vemos.-
Después, le respondo a Claudia.
•Claudia estoy bien. No te preocupes. Sólo necesito tiempo para pensar.
Por último, decido tomar coraje y escribirle a Víctor.
•Está bien, tienes razón.
Debemos hablar. Cuando quieras puedes venir. No pienso salir aún, al menos no por ahora. Estoy en la habitación 6, en el motel que está junto a la ruta.
Alrededor de cinco minutos después recibo un mensaje de Víctor.
•En una hora llego.
Nada más. Me quedé esperando, hecha un manojo de nervios.
Una hora y media después tocan a la puerta.
Es él.
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Tal vez en otra vida...
RomanceEsta es la historia de una joven como cualquier otra, con la vida en aparente orden hasta que el pasado la encuentra abriéndole viejas heridas y trayéndole nuevas interrogantes. Ella sentía muchas cosas por "Él" ¿Y Él? Él sabía que ella existía...
