Desespero

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En realidad por siempre, es un largo tiempo.

Un pensamiento, se queda en tu mente si no lo dices. Obtienes los cambios producidos al dar tu opinión, eso me habían enseñado pero hace tanto que no soy dueña de ellos. No hasta que él apareció.

—Sehun...

Me oigo decirle. Él no emite ninguna acción, solo me mira.

Trato de levantarme pero tengo tanto miedo. Estoy aterrorizada.

Mentí, claro que lo hice. Él pensó que en mí como alguien honesto pero no lo soy. 

Temblorosamente, volví a ponerme de rodillas. Apreté mis ojos tratando de retener las lágrimas que querían escapar de mí. Estoy tan molesta. 

Siento a algo que me rodea el cuello, y me veo a mi misma alzada en el aire. Trato desesperadamente en librarme, pataleo pero no puedo. Pido a ciegas misericordia.

—Por favor...—Abro los ojos tomando en cuenta al instante que hay una foto delante de mi. Lo miro, esta vez directamente. Sonrío, bueno como puedo— Todo está bien.

El agarre se tensa más haciéndome sollozar ¿Qué sería lo peor? Podría terminar hecha puré en la pared o lanzada por una ventana, a estás alturas sería menos doloroso. Tomó una gran bocanada de aire— Estás bien Sehun, yo te protegeré ¿lo recuerdas?— Digo casi asfixiada.

Ocurrió algo, tal vez sean los delirios de la última esperanza al ver a su postura relajarse y a un brillo inexplicable en sus ojos... ¿Podría recordarme?

—¡Suéltala! —Escucho a lo lejos gritos, golpes y otras cosas que no logro reconocer. Vuelvo a entrar en pánico al ver como Sehun cae al piso sin cuidado sobre mí, trato de moverme pero no lo consigo. Estoy congelada y él inconsciente. No logro distinguir nada después de eso, las voces se vuelven más distantes y las luces del pasillo brillan más.

[*****]   

  

Despierto en una pequeña habitación, se vuelve más irritante al ser las paredes totalmente blancas más la fuente de luz natural que llena la estancia. Trato de sentarme pero todo me da vueltas así que caigo en la misma posición con extraña sensación de náuseas. Resoplo, hace tanto calor que busco el control remoto de aire acondicionado.

 —¿Calor?— Miro al señor Williams que está recostado en sofá al otro lado del cuarto. Consigue hacer que la temperatura disminuya y todo se vuelve fresco al cabo de un rato— Llevas casi tres días aquí —Menciona sin siquiera haberlo preguntado. Asiento para mí aún con la mirada clavada en el techo.

—¿Qué sucedió?— Pregunto después de rato. Frunzo el ceño por una pequeña puntada en mi cien.

—Todos temíamos que...Que estabas muerta— Dice.— Convulsionaste un par de veces, tenías que estar conectada con oxígeno porque ayer no parecías reaccionar a ningún trato— Suspira— Eres tan terca para irte de éste mundo así ¿sabes?— No hablo— HyunBin fue arrestado, en este momento está siendo trasportado a una incómoda reunión con el consejo principal...

—¿Qué?— Salté en el colchón casi al instante poniéndome como no había podido hace rato.

—Lo digo enserio— Hace una mueca, coloca sus manos tras su nuca— Todo ese desastre fue su culpa— Bufó— El proto...no, eh Sehun, si él...Pues, hubo una revisión de mantenimiento no supervisada, vimos como fue la manipulación y se ha confirmado que insertaron una memoria dañada en su sistema.

—¡¿Ha estás alturas lo vienen a... —La punzada fue tan fuerte que me obligó a acostarme enseguida— Que se pudra... 

—Ahora toca resolver todo el desastre que generó Sehun, y que determinen que sucederá con él.

—¿Están bromeando? ¡Todo fue manipulado! —Exclamo indignada.

—Jung, escucha— Se sentó apoyando sus codos sobre sus muslos— Ya tienes que parar, no luches más y deja que las cosas tomen su curso. Sí, en un principio solo se trataba de un simple experimento y ahora todo es diferente.

— No es su culpa.

—No lo defiendas, ahora todo es inútil. Solo nos queda esperar la decisión que tomen acerca del futuro de Sehun. — No lo puedo aceptar — Sé que es complicado, más cuando era necesario involucrase "sentimentalmente" con el trabajo. Lo lamento.

—¿Él está bien?— Murmuro tan bajo que dudo que me pudiera oír, más sí recibí respuesta. Suspiré aliviada. Con paciencia me remuevo sobre el colchón hasta estar al borde de la camilla casi tocando con mis pies la cerámica blanca y fría de la habitación—Necesito verlo.

—No será fácil, ya sabes... Pero te ayudaré, como sea.  


    

1.6.9 [SEHUN]©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora