Quiero recuperarte/Terminada

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—Empresa Agreste ¿Qué podemos hacer por usted?.

—Necesito hablar con Gabriel—El hombre que hablaba detrás de la línea esperaba impaciente por una respuesta.

—¿Con quien me comunico?.—Nathalie tecleaba en la computadora registrando cada una de las actividades que le solicito su jefe.

—Solo dígale que soy Bernard Kouchner— ella al escuchar el nombre abrió sus ojos como platos y rápido fue a dar aviso a Gabriel.

Nathalie se levantó de su escritorio dirigiéndose a la sala de juntas, en ese momento el Agreste mayor tenía una reunión importante con algunos de los que estaban encargados para la conferencia que se haría para la nueva línea de ropa en dos semanas.

Tocó la puerta esperando un respuesta que la hiciera entrar en ese gran salón lleno de ejecutivos.

—Adelante.

Con paso rápido pero relajado trato de dar una buena imagen al presentarse de esa forma delante de todas esas personas.

—Señor Agreste, disculpe la interrupción pero necesito hablar con usted.

—Ahora no Nathalie estoy...

—Es el doctor Bernard— Dijo para convencerlo, Gabriel solo pudo cambiar su expresión a asombro, carraspeo para apaciguar lo que sucedía.

Se disculpo para ir un minuto a atender el llamado dando una breve pausa a la junta. Rápido fue hacia el escritorio de Nathalie con ella detrás y descolgó el teléfono tratando de no temer lo peor.

—Habla Gabriel Agreste.

—Gabriel, está despertando.

°°°

Gabriel Agreste casi corría por los pasillos de aquel hospital, Nathalie está vez iba a su lado con sus respiraciones levemente agitadas.

Esperaron un momento en la sala de espera casi impacientes por no darles la atención debida pero tenían que esperar a que el doctor Bernard saliera de urgencias por otro paciente ya que el era el único que podía atenderlos.

—Señor, trate de calmarse— Sugirió Nathalie al verlo tan tenso.

Sin embargo el hizo caso omiso, no estaba preparado para enfrentar a su hijo después de tres años en los que el estuvo en coma. Esperaba que no lo odiara pero ¿Cómo no hacerlo si lo ocultas de su familia?. En cuento vio pasar al doctor por el marco de la puerta repidamente se levantó de su sitio para llegar a él.

—Bernard ¿Cómo está?.

—Él esta bien Gabriel, calmate esta un poco desorientado y tratando de despertar, puedes pasar a verlo.

Los dos se dirigieron hasta el cuarto del paciente, este seguia con aquellos tubos y el aparato que lo hacía respirar, sus ojos estaban entreabiertos.

—¿Adrien...?— Hablo el de cabello platinado acercándose cada vez más hasta la camilla donde se encontraba su hijo.

—M-Marinette...— Logró pronunciar  en un pequeño pero audible susurro con sus ojos aun cerrados.

Gabriel comenzó a desesperarse, queria ver a los ojos a su hijo, el doctor trató de calmarlo al ver su reacción.

—Relájate es normal, después de cuatro años en coma tiene que recuperarse de el poco a poco— Se acercó Bernard hasta él.

Una enfermera trataba de revisar que todo estuviera en orden respecto a la salud del joven rubio.

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